Un tercio de los 188 parados de febrero son menores de 25 años

Gabriel Lemos / Xosé V. Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Solo la industria y la construcción siguen creando empleo en la comarca

05 mar 2013 . Actualizado a las 07:02 h.

Febrero dejó 188 nuevos parados en la comarca, que alcanza ya los 42.605 desempleados registrados en las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Un mal dato, si se tiene en cuenta que ya son seis los meses consecutivos -desde que en septiembre finalizase la campaña estival- en los que la economía local mantiene activa la trituradora de empleos, pero al que se le puede matizar la gravedad si se compara con el de febrero del 2012, cuando en los veintidós ayuntamientos del área coruñesa se inscribieron al antiguo INEM 659 personas, más del triple que el mes pasado.

Como siempre con estas estadísticas, la alegría y las penas van por barrios o, en este caso, por ayuntamientos. Así, los municipios donde más se redujo el desempleo son Aranga y Curtis, un 3 % menos en cada uno, aunque la cifra tan solo se traduce en la eliminación de las listas del paro de cuatro y siete vecinos, respectivamente. En términos absolutos, la caída fue mucho mayor en A Coruña ciudad, donde 35 personas abandonaron el registro de desempleados, hasta cerrar febrero con 24.474, aunque la reducción solo supone limar el registro total un 0,1 % .

En el lado opuesto de la balanza se encuentra Mesía, que lideró el incremento del paro, al elevarse un 10,2 % en solo un mes, tras sumar 20 nuevos parados. Sin embargo fue Cambre el ayuntamiento donde más vecinos perdieron su empleo, un total de 51, aunque la subida en términos relativos se queda en un 2,2 %.

El análisis desagregado de los datos permite observar que la destrucción neta de empleo cabe imputársela en exclusiva al sector servicios, cuyas empresas prescindieron el mes pasado de 263 trabajadores en la comarca. Una caída que solo se consiguió compensar parcialmente con el auge de la industria y la construcción, donde se crearon 37 y 42 empleos, respectivamente. Mientras, el sector primario -agricultura y pesca- se mantuvo estable, con un parado más en febrero, mientras que a las listas del SEPE se incorporaron tres personas sin empleo anterior.

La particular estructura del desempleo en el mes de febrero tuvo también su incidencia en el perfil de los nuevos parados. Así, fueron los jóvenes menores de 25 años los que más sufrieron el azote del desempleo, al representar uno de cada tres nuevos parados de febrero a pesar de que este colectivo apenas supone un 6 % del total de desempleados de la comarca.