Los trabajadores escenificaron un entierro en sus protestas y la Policía Nacional desalojó a un sindicalista
26 sep 2012 . Actualizado a las 21:13 h.La manifestación de los trabajadores de Alcoa en el que reclaman soluciones para el futuro de la industria en A Coruña y de San Cibrao, en A Mariña provocó un colapso en el tráfico en el centro de A Coruña.
La protesta cortó el tráfico durante una hora en el entorno de la Delegación del Gobierno. Con pancartas con lemas como «Non ao desmantelamento industrial. Contrato de enerxía xa!»
Después de llevar media hora de protestas se produjo un incidente entre los manifestantes y la policía. Varios agentes arrastraron a un delegado de la CIG de Alcoa. Estos hechos caldearon el ambiente y los trabajadores bloquearon el tráfico media hora más, lo que provocó que las colas llegaran hasta la altura de la estación de tren por Alfonso Molina y a la Casa del Mar por avenida del Ejército.
Desde la Subdelegación del Gobierno se indicó que la protesta no tenía autorización para cortar el tráfico, que solo se preveía que durara media hora y que la policía llevó al sindicalista, porque éste se negó a identificarse.
En la manifestación participaron miembros del comité de Alcoa en San Cibrao, que portaban una pancarta propia pidiendo el mantenimiento de los puestos de trabajo. También se sumaron a la protesta políticos del BNG y EU.
Desde el comité de empresa de la factoría en A Coruña reprochan a la Xunta que se olviden de la planta coruñesa en todas sus declaraciones públicas y temen que el anuncio que haga la empresa el próximo 5 de octubre sea para anunciar el cierre de plantas.
Nazario Arias, presidente del comité de empresa de la factoría coruñesa de Alcoa, consideró que la actitud de la Xunta es de «ninguneo» y apuntó que con este tipo de protestas pretenden «decirlle a Javier Guerra e a Feijoo que na Coruña hai unha fábrica» y dijo que no sabe si tienen que pensar «que somos moedas de cambio a fábrica da Coruña coa de San Cibrao». Indicó que no tienen nada en contra de sus compañeros de A Mariña, pero quiso dejar claro que la lucha desde la Xunta debe de ser por las dos factorías gallegas. Agradeció las referencias a Alcoa que hizo ayer el alcalde coruñés, Carlos Negreira, pero consideró que «xa lle tocaba dicir algo» y comentó que las corporaciones de otras ciudades con presencia de esta industria son mucho más activas. «O 5 de outubro eu creo que van a anunciar un peche, o que vai pasar non o sei, pero o que ía ser unha regulación enerxética convertiuse nunha reforma fiscal, e non nos vale para nada, peor, nos grava», comentó Arias, que dijo que lo anunciado ayer por el ministro Soria «acaba sendo o mesmo, porque as cláusulas de interrumpibilidade xa as tiñamos». «Seguimos esperando, pero noticias non temos. Esperamos que haxa solución, pero o final de ano está a volta de esquina e despois da regulación aínda faltaría negociar coas eléctricas, co cal os tempos empezan a pensar moítísimo e penso que as noticias de Alcoa vai soltar van a ser lapidarias», consideró.
Tras la protesta de hoy en A Coruña, los comités de empresa y trabajadores de las fábricas de Alcoa en A Coruña, San Cibrao, Avilés, Amorebieta y Alicante, además de varios sindicatos, respaldarán mañana una concentración ante la Xunta, para demandar el mantenimiento de una tarifa reducida para los grandes consumidores de energía eléctrica cuya vigencia finaliza este año, «lo que pone en grave riesgo el futuro de la actividad industrial y de más de 4.000 puestos de trabajo», indican los representantes de los trabajadores.
La conselleira de Traballo, Beatriz Mato, en una rueda de prensa esta mañana en la sede del PP, reiteró el «compromisto da Xunta con Alcoa é desde o primeiro momento inamovible e firme, de apoio aos traballadores, a empresa e ao mantenemento das instalaciones en Galicia, tanto na Mariña como na Coruña». La conselleira indicó que se ha trasladado al ministro las inquietudes e indicó que trabajan para buscar una solución, al mismo tiempo que responsablizaba al PSOE de la actual situación. «É un probema herdado pola falta de compromisos dos gobernos socialistas anteriores e agora tócalle unha vez maís aos gobernos populares darlle unha solución», apostilló.
Por su parte, desde la CIG se reclamó al Gobierno central que «deixe de demorar a resolución da problemática da tarifa eléctrica e dea unha pronta solución a esta cuestión, xa que a falta dun prezo da enerxía competitivo é a escusa aducida pola empresa para ameazar co peche. Hai que ter en conta tamén que Galiza é produtor de enerxía eléctrica, polo que a lóxica fai pensar que dende a administración resultaría sinxelo establecer outro tipo de prezo tanto para a industria como mesmo para os fogares do noso país». Asimismo, insta a los gobiernos del PP que logren el compromiso de la multinacional de mantener la actividad en A Coruña y A Mariña, además de los puestos de trabajo, o sea la Administración el que busque un comprador por las instalaciones o nacionalice la producción.
Mientras, la Unión Comarcal de CIG de A Coruña mostró su rechazo «ao novo intento de criminalizar as mobilizacións da clase traballadora vivido este mércores ás portas da Delegación do Goberno. A central sindical censura que no marco dunha concentración pacífica e debidamente comunicada a única resposta do Goberno sexa promover unha actuación represora, máxime cando o persoal o único que reclama é a continuidade dos seus empregos».