El grupo socialista ha criticado la «política recaudatoria» del impuesto que el gobierno local quiere cobrar a los coruñeses por casarse en los salones de María Pita «a pesar de que Negreira prometió bajar los tributos cuatro puntos».
Los socialistas, que mostraron su apoyo a la ampliación de horario a los viernes por la tarde, toda vez que los sábados se hacían insuficientes para atender la alta demanda, lamentan que este aumento solo sea una estrategia para cobrar una tasa municipal de 125 euros por pareja.
El PSOE coruñés afirma que si el PP no rectifica aprobará con mayoría absoluta esta tarifa a las parejas que ya hayan reservado para el 2012, lo que supondrá un gusto añadido más. Los socialistas consideran que «no es la mejor forma de apoyar a las nuevas familias». Destacaron que es la primera vez que este impuesto se aplica en la ciudad. El partido socialista reitera el «incumplimiento del compromiso del Ayuntamiento con los coruñeses tras sus promesas electorales» y explican que la congelación, por tercer año consecutivo, avala la política fiscal sostenida por el gobierno de Javier Losada». La evolución de los impuestos en los últimos años es nueve puntos por debajo del IPC.
El BNG rehúsa adelantar el IBI
Por su parte, el portavoz del BNG, Xosé Manuel Carril, considera que el beneficio fiscal del IBI es «una tomadura de pelo de Negreira», ya que obliga al ciudadano a adelantar el pago del impuesto de bienes inmuebles seis meses a cambio de una reducción de dos puntos. Carril denunció que el único beneficiado es el propio Ayuntamiento, que consigue ingresos por anticipado.
La abogada coruñesa Mari Luz Canal fue elegida por los militantes de Esquerda Unidad para liderar la propuesta de las listas al Congreso de los Diputados y al Senado. Los otros candidatos escogidos por la asamblea abierta fueron Suso Díaz, Argimiro Doce y Arturo Salgueiro. Dos de los elegidos por los asistentes son afiliados al partido y dos son independientes.
La reunión, abierta a todas las corrientes del grupo y a la ciudadanía, duro tres horas. A ella acudieron miembros de distintas organizaciones sociales que asistieron a título individual, como Democracia Real Ya, Stop Desahucios, No les Votes, Ben Común, así como distintos sindicatos de trabajadores y varias organizaciones ecologistas.
Esquerda Unida manifestó que lleva trabajando dos años en un proceso que pretende reformular la izquierda en la búsqueda del «avance dos dereitos das familias traballadoras con un proxecto de esquerda social».