Negreira busca el apoyo de la oposición para renunciar a los coches oficiales en A Coruña

El alcalde de A Coruña, Carlos Negreira, quiere que el ahorro al prescindir de los coches oficiales en esta legislatura se prolongue en el futuro y llevará una moción al pleno para recabar el apoyo de la oposición.

«En un Ayuntamiento como el nuestro, con muchas facturas de cajón, necesitamos blindar el gasto social. Es un gesto para el presente y para el futuro, como habrá otros muchos», ha afirmado Negreira en declaraciones a los periodistas tras visitar junto al conselleiro de Justicia, Alfonso Rueda, el antiguo edificio de la fábrica de Tabacos.

En la jornada de ayer, el Ayuntamiento anunció que prescindirá de los diez vehículos con los que cuenta el parque móvil municipal y que los miembros del Ejecutivo municipal, incluido el alcalde, utilizarán taxis para trasladarse dentro de la ciudad.

Únicamente se dejará un coche de cortesía a disposición de toda la Corporación para desplazamientos oficiales fuera de la ciudad y atender a visitas institucionales.

Esta medida supondrá un ahorro a las arcas municipales de dos millones de euros en esta legislatura, suprimiendo un gasto anual de 100.000 euros en el mantenimiento de vehículos y 400.000 en conductores.

«La decisión está plenamente meditada y forma parte de nuestro proyecto de invertir más en los ciudadanos y menos en las comodidades de los políticos», ha afirmado Negreira, quien con esta medida pretende «blindar» el gasto social.

El regidor ha señalado además que su intención es que esta medida de ahorro quede implantada para el «futuro» por lo que llevará una moción al próximo pleno municipal para que quede «constancia» de la postura de los demás partidos.

A este respecto, ha criticado, la postura adoptada por el PSdeG, que ayer puso en entredicho la rentabilidad de esta medida.

«Con los dos millones de euros que se ahorran en coches oficiales, el Ayuntamiento tiene suficiente para desplazamientos en autobús y en taxis para los próximos 50 años», ha afirmado.

«Nos piden a gritos que continuemos con los coches oficiales pero la realidad es que A Coruña es una ciudad cómoda para andar.

Queremos escuchar a los vecinos, que llevan tiempo apretándose el cinturón, mientras que los anteriores gestores prefieren despilfarrar dinero», ha añadido.

Por su parte, el conselleiro de Presidencia, Administraciones Públicas y Justicia, Alfonso Rueda, ha valorado el «compromiso» del alcalde y ha subrayado que la decisión de prescindir de los coches oficiales está en «sintonía con los ciudadanos».

No obstante, no ha querido pronunciarse sobre la conveniencia de extender la medida a otros ayuntamientos y ha asegurado que cada administración es soberana.

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