La conquista de Marineda City

Javier Becerra
Javier becerra A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Gran afluencia de público, cifrada por la gerencia en 90.000 personas

15 abr 2011 . Actualizado a las 15:39 h.

La apertura al público de Marineda City respondió a lo esperado. Hubo gente, hubo colas, hubo atascos y hubo compras. Sin que nada se desbordase en ningún momento, lo cierto es que el flujo de personas fue constante a lo largo del día, llegando a contar por miles los asistentes. Según la dirección del centro comercial, a lo largo del día desfilaron 90.000 personas por los diferentes establecimientos que integran el complejo.

Las primeras señales se percibieron temprano. Alrededor de las nueve de la mañana, la colisión entre los trabajadores del centro y el público más madrugador propició que la circulación de la rotonda de Ikea y el acceso a Marineda City fuera lenta y se interrumpiera por momentos. Hasta las diez estaba prohibido el acceso a los párkings del público y ello propició largas colas de automóviles.

Mientras todo eso ocurría, en el interior de las tiendas los empleados daban los últimos retoques para que todo estuviese a punto. En la mayoría de los casos, como por ejemplo en Primark, Decatlhon o C&A, los responsables de las firmas pronunciaron un pequeño discurso a los empleados para motivarlos en un primer día que, tras los aplausos y los mensajes de ánimo, se antojaba de continuos reajustes.

Lo fue. En la mayoría de los casos, veteranos de las cadenas, generalmente provinientes de otras provincias, supervisaron que todo funcionase correctamente el primer día. Lo constataba el continuo trasiego de maletas que se pudo ver a primera hora de gente que llegaba directamente de Alvedro. En las cajas, por ejemplo, les enseñaban desde cómo grapar y guardar los tiques de los pagos con tarjeta a cómo hacer en el caso de quedarse sin cambio.

A las once de la mañana los pasillos de la tienda ya estaban a rebosar. Muchos venían en el bus que, de manera gratuita, transportaba a la gente desde la plaza de Pontevedra. Funcionó toda la jornada y en todos los viajes fue totalmente abarrotado. En algún momento el conductor, para no dejar gente fuera, tuvo que instar a los viajeros a que se fuesen al pasillo del final para dejar sitio.

Fuera, algún peatón ponía en peligro su vida cruzando la mediana de la carretera Baños de Arteixo, justo delante de Marineda City. Pese a la reja que separa ambos carriles, algunos desafían la clara situación de riesgo que existe en ese tramo.

Veteranos de las compras

Entre las personas que acudieron a este primer día se encontraban verdaderos expertos en debuts. Es el caso de Alejandro López, que se plantó a las seis de la mañana para beneficiarse de las promociones: «Yo ya estuve haciendo cola el día de la apertura de Ikea y tenía muy claro que hoy también vendría», decía con unas visibles ojeras. «No es tanto como dicen, esto no son las avalanchas que se espera mucha gente», añade.

En el centro las tiendas de ropa y los establecimientos de hostelería fueron los más concurridos. En el primer caso, había cierta expectación entre el público por tiendas como las de Zara o Primark, que inauguraban sus dos establecimientos más grandes en la ciudad, o Foot Looker, que abría el primer establecimiento de su cadena en Galicia.

«Estuve haciendo cola en la apertura de Ikea y tenía claro que hoy vendría»

Alejandro López