Las asociaciones vecinales han registrado un repunte de los actos vandálicos

Las asociaciones vecinales de barrios céntricos como Orzán, Riazor o el Ensanche han registrado en los últimos tiempos un aumento de actos vandálicos como pintadas y roturas de mobiliario urbano como papeleras, contenedores y jardineras. A pesar de que Cespa, la empresa concesionaria que se encarga de reparar este tipo de desperfectos, señala que su actividad laboral en este área de mantenimiento es «normal», las quejas de los residentes han aumentado. Pedro Méndez, presidente de la asociación de vecinos de Riazor, explica que el número de destrozos «ha subido bastante». «Y no solo afectan a las papeleras, contenedores o a las paredes en general en el caso de las pintadas. También aparecen retrovisores de coches y portales rotos, especialmente durante el fin de semana». De la misma opinión es Gerardo Crespo, presidente de la asociación El Ensanche. «A Coruña está bastante mal en este tema si la comparamos con ciudades como Pontevedra u Oviedo. Existe una gran permisividad con las pandillas que se dedican a hacer grafitis, por ejemplo. Otro problema son la cantidad de chicles que hay pegados en las aceras», explica.

Áurea López, presidenta vecinal del Orzán, coincide en que existe un repunte vandálico y señala también la gran permisividad de las autoridades con estos temas. «Debería instaurarse la norma de que aquellos que rompan o manchen algo tengan que arreglarlo después con trabajos comunitarios», señala sobre una posible solución en la que coincide con Pedro Méndez de la agrupación de Riazor.

Por su parte Fernando Rubín, de la asociación de Paseo de los Puentes, Ciudad Jardín y San Pablo, señala que, aunque no han visto que hayan aumentado los actos vandálicos, sí que han notado que ha regresado el botellón en lugares que había desaparecido para trasladarse a Méndez Núñez. «Estamos en contra de que se permita el botellón en ningún sitio. No se puede orientar a la juventud hacia el alcoholismo», apunta.

---

---

---