Hoy finaliza el plazo de abono voluntario de los impuestos municipales de carácter anual. Estos ingresos afectan los recibos del impuesto de bienes inmuebles, tanto rústicos como urbanos, el impuesto de actividades económicas, las tasas de basuras, cementerios, vados y la contribución de aparatos distribuidores. A partir de mañana, los recibos pendientes recibirán un recargo del veinte por ciento.
En total, el gobierno local prevé ingresar 66,4 millones de euros en un proceso que es el que tiene el más alto grado de cumplimiento por parte de los ciudadanos, según se recoge en las memorias anuales del Ayuntamiento. Ello supone un incremento de casi dos millones de euros con respecto al ejercicio anterior, a pesar de que el gobierno local remarcó en varias ocasiones que se habían congelado las tasas, si bien la concejala de Hacienda, Carmen Marón, sí recordó que se había registrado un pequeño incremento en el tramo estatal de los recibos del impuesto de bienes inmuebles, por el incremento de la repercusión del valor catastral, que se traduce en una subida del 1,8 por ciento, la misma que la estimación del IPC, en ese apartado.
La principal novedad esta campaña de recaudación procede del hallazgo de cuatro mil nuevos contribuyentes, según informó la Concejalía de Hacienda, que son los que aportarán esos dos millones de euros adicionales que prevé recaudar el Ayuntamiento en esta campaña.