Rosalía Mera: «La cuestión económica es importante, pero hay cosas que son más fundamentales»
A CORUÑA
La Obra Social La Caixa renovó ayer un convenio de colaboración con el Grupo Incorpora Galicia, constituido por diversas entidades sociales gallegas y que tiene como objetivo fundamental la integración laboral de personas en riesgo. Rosalía Mera, presidenta de una de estas entidades -Fundación Paideia- y cofundadora de Zara, dejó claro que aunque «la cuestión económica es importante, hay cosas que son más fundamentales», como es el caso de esta plataforma que trata de ayudar a todas aquellas personas que sufren algún tipo de exclusión social para encontrar un puesto de trabajo. Agradeció al director del programa social de La Caixa y al director general de la entidad financiera en Galicia, Jaume Farré y Marc Benhamou, respectivamente, los «no recortes» en el presupuesto teniendo en cuenta el «año tan complejo» en el que nos encontramos. Los presidentes del resto de entidades participantes también quisieron mostrar su gratitud hacia La Caixa por permitir que, un año más, este proyecto se lleve a cabo y destacaron el hecho de que incluya «no solo a personas con discapacidad» como antes, sino a todas las excluidas socialmente. Carmen Avendaño, presidenta de la fundación Érguete-Integración, citó el proyecto de «formación en prisiones» puesto que se trata de «un colectivo muy amplio y abandonado»; Luis Barreiro, presidente del Instituto Galego de Xestión para o Terceiro Sector, resaltó la «apuesta por la juventud», que «nos necesita», y, por último, Xosé María Roqueiro Otero, vicepresidente de la Federación de Asociaciones de Familiares y Personas con Enfermedad Mental de Galicia, aprovechó para manifestar las «enormes esperanzas» que como nuevos integrantes del proyecto tienen.
Los responsables de La Caixa destacaron «la calidad» con la que las fundaciones gallegas desempeñan su trabajo y manifestaron sus deseos de que el proyecto siga renovándose.
Éxitos del proyecto
Este es el quinto año que se firma el acuerdo, gracias al que «más de 500 personas» han conseguido puestos de trabajo. De estas, 121 corresponden a inmigrantes, 110 discapacitados y 248 a jóvenes con dificultades para encontrar trabajo. Esto ha sido posible gracias a que «de las 484 empresas gallegas visitadas, 301 han contratado» a personas excluidas.