Nuevos compañeros para la clase de gimnasia

A CORUÑA

30 abr 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

«¡Qué miedo dan! ¡Cuántos son!». Con estas exclamaciones recibían ayer ocho jóvenes del centro de educación especial Nuestra Señora de Lourdes de Aspronaga a sus veinticinco nuevos compañeros de una original clase de gimnasia, que tuvo como escenario el colegio Hijas de Jesús -Jesuitinas-. El objetivo de esta actividad era integrar a estos chavales con síndrome de Down, y con edades que oscilan entre los 20 y los 23 años, en las actividades cotidianas que realizan los estudiantes de sexto de primaria, que acaban de cumplir 11 o 12 años.

Para ello, se les propusieron originales pruebas en las que cada uno daba a conocer su nombre y sus cualidades, así como otras en las que unos tenían que coger a otros y acababan fundidos en un abrazo. Juegos de relevos por equipos y un complicado baile de pareja, en el que los dos participantes debían impedir que el globo que los separaba cayese al suelo, fueron otras de las actividades que ayer compartieron los alumnos de Aspronaga e Hijas de Jesús.

Mar Serrano y Verónica Núñez fueron las profesoras encargadas de coordinar esta iniciativa, de la que destacaron la gran implicación por parte de todos los estudiantes. De hecho, hubo quien soltó más de una lágrima al ver como los chavales de sexto de primaria se involucraban y valoraban los esfuerzos de los chicos y chicas del otro colegio, y como estos intentaban sacar lo mejor de sí mismos para hacer funcionar la actividad.

Sonrisas y lágrimas

Las sonrisas y el buen entendimiento fueron constantes durante toda la hora que duró la actividad, que por primera vez se realizaba en el colegio Hijas de Jesús de la Zapateira. Por este motivo, cuando llegó el momento de la despedida, muchos participantes no pudieron contener las lágrimas al decir adiós a estos nuevos compañeros de clase.