La jueza de Betanzos que lleva el caso de la muerte y descuartizamiento de dos vecinos de Muros en noviembre del año pasado ha decidido decretar la libertad provisional a espera de juicio de Alberto Souto, conocido como Nocillas.
Este hombre está en prisión desde el pasado mes de abril. Ingresó en el penal de Teixeiro cuando fue detenido como miembro de una banda dedicada al asalto de chalés e involucrada en el horrible crimen que terminó con la vida de Manuel Ramón Luces y Javier Toledo Ferrer. Junto a él, también fueron enviados a prisión ocho personas más. Entre ellas estaba su novia y también José Ramón Blanco Vila, alias Coke, el principal sospechoso de cometer el brutal asesinato y posterior desmembramiento de los cuerpos.
Uno de los principales motivos de la puesta en libertad de Nocillas, defendido por el abogado penalista Ramón Sierra, es su colaboración con la Justicia para el esclarecimiento del caso. Nada más ser detenido no dudó en contar, al igual que su novia, que el asesino de las dos personas había sido José Ramón Blanco Vila.
Juan Ramón no respondió a la acusación en principio y guardó silencio. Hasta que hace dos meses dio un giro total en su actitud. Para contraatacar, declaró ante la jueza que el autor de la muerte y el descuartizamiento había sido Nocillas, no él. Incluso hace dos semanas se produjo en el Juzgado de Betanzos un careo entre ambos ante el juez, donde ambos se mantuvieron en sus posiciones sin echar marcha atrás en ningún momento.
El hecho de que la jueza haya decidido poner en libertad a uno de ellos dice mucho de la culpabilidad del otro.
Uña y carne
Hasta abril, cuando ambos fueron detenidos, eran uña y carne. Pero fue ponerle los grilletes a Alberto Souto y desatarse una guerra entre los dos que los llevó a un careo e incluso a recibir varias amenazas de muerte por parte de Coke.
Nocillas dijo desde el primer día que su compañero Coke había asesinado a dos hombres, descuartizado sus cuerpos y enterrado en una fosa séptica de una casa en Fonteculler.