Despliegue en Vilaboa para «rescatar» a una mujer que se encontraba sana y salva

A CORUÑA

21 jul 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Una mujer de 76 años, que llevaba encerrada en su casa desde el viernes pasado, desató la alarma en Vilaboa. Los vecinos, que veían que iban pasando los días sin que contestase ni al timbre ni al teléfono, llamaron a los servicios de emergencia en torno a las nueve de la noche.

A la zona, en la avenida de Vilaboa, se desplazaron de inmediato la Policía Local y los bomberos, así como la Guardia Civil y el 061. Los bomberos tuvieron que entrar por una pequeña ventana del piso superior. Una vez dentro, comprobaron que la anciana estaba bien. No obstante, un médico la examinó, aunque no quiso dar ninguna información al respecto. La situación causó una gran expectación entre los vecinos de la zona.

«Hace días que intentamos contactar con ella porque se murió una conocida», señaló una mujer. Los residentes se empezaron a preocupar cuando la afectada respondió diciendo: «¡Non podo!». Asimismo, otra indicó que sabían que «estaba viva porque gritaba cuando la llamábamos», pero que, al no abrir la puerta, desconocían «si se había caído o tenía algún problema». También indicaron que es una persona que procura «evitar ir al médico», por lo que desconocían si tenía «alguna enfermedad importante».

La anciana acostumbra a encerrarse en la casa con llave y atrancar la entrada, «seguramente por miedo», explicó una vecina que indicó que «no suele contestar nunca a las llamadas telefónicas. La llamamos varias veces y no había manera, no respondía -decía otra- ni a su hermano».

Médicos de urgencias se acercaron hasta el domicilio para atender a la mujer, así como sus familiares, dos sobrinos, que llegaron alrededor de las diez y media de la noche para comprobar que se encontraba en buen estado.