La Audiencia condena a 20 años de prisión como autora del crimen del Agra a Iria Ibón Crespo

La Voz

A CORUÑA

27 abr 2009 . Actualizado a las 10:34 h.

No hubo sorpresas en la resolución de la sentencia y se cumplió el guión previsto tras la vista oral. La Audiencia Provincial condenó a una pena de veinte años de cárcel -diez por un delito de homicidio consumado, cinco por uno en grada de tentativa y dos y medio más por cada uno de los dos robos cometidos- a Iria Ibón Crespo, a la que responsabiliza de la muerte de una anciana, Rocío Arana, y del intento de homicidio de otra, Visitación Fisteu, para intentar robarles sus pertenencias y desvalijar sus servicios.

De poco sirvió la estrategia urdida por el abogado defensor de la sentenciada, Jesús Lamelas, que intentó colar sin demasiado éxito la atenuante de adicción a las drogas de Iria Ibón con el fin de rebajar la pena de veinte años de cárcel exigida por el fiscal. Además, la condenada tendrá que hacer frente al pago de más de 110.000 euros en concepto de indemnizaciones a las dos mujeres atacadas, con un total de noventa mil para los herederos de la fallecida y más de veinte mil para la herida.

La resolución judicial considera probado que Iria Ibón asaltó en el portal de su casa, en la calle Páramo número 3, a la primera de sus víctimas, Rocío Arana, a la que mató al clavarle el cuchillo que portaba en el cuello.

La defendida por Jesús Lamelas no admitió de forma explícita durante el juicio la comisión del asesinato, ya que se limitó a señalar que solo había tenido un «altercado con una señora mayor» y ver luego un gran charco de sangre.

Testigo

El tribunal consideró el testimonio de un viandante, que aseguró haber visto a la autora del delito con una mancha de sangre en su pantalón.

En el delito de homicidio consumado, no hizo falta más que el testimonio de la víctima, que reconoció a la autora de los numerosos cortes sufridos durante el ataque sin ningún genero de dudas. Los forenses certificaron el peligro de las heridas sufridas, ya que, según su valoración, de no haber recibido una asistencia médica de forma inmediata, las heridas sufridas podrían haberle costado la vida en unos pocos minutos.