La dama de la canción cubana dio candela al Coliseo

Juan Torreiro

A CORUÑA

14 mar 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Omara Portuondo ofreció ayer su primer concierto en Galicia de los dos que tiene previstos; esta tarde actuará en el Centro Cultural Caixanova de Vigo. La visita de la cantante cubana consumió una nueva propuesta del ciclo Música con raíces, y antes de su actuación, compareció ante los periodistas en un encuentro en el que estuvo acompañada por Javier Rodríguez, responsable del Coliseo, que fue el encargado de abrir la charla para recordar que el de ayer fue el tercer concierto del ciclo y que, para la ocasión, el recinto coruñés estrenó un nuevo aspecto en formato teatro, con el que, dijo, «intentamos dulcificar el ambiente ».

Tras estos datos técnicos, llegó el turno para una dicharachera Omara Portuondo, quien comenzó hablando del disco que presentó en A Coruña,

Gracias,

argumentando que reúne una selección de obras y canciones cubanas «de siempre» y que nunca las interpretó fuera de la isla, y comentó estar muy agradecida por todas las colaboraciones que reúne el álbum, como la de Pablo Milanés, Chico Buarque, Jorge Drexler o Chucho Valdés, entre otros. A través de este trabajo, según dijo la intérprete, quiere agradecer al público, a sus amigos y compañeros el trabajo compartido durante 60 años, que pasaron «casi sin darnos cuenta» y que le permitió llevar la cultura de su país por todo el mundo

. Esta actuación fue la primera que la trajo a Galicia y sobre la ciudad de A Coruña, Omara Portuondo comentó que «Es una zona muy linda, que al igual que en Cuba, aquí hay campo, mar, amor y muchas ganas de vivir y trabajar». En lo que respecta a la actuación, Portuondo apareció sobre el escenario rodeada de un quinteto de músicos muy jóvenes, con ayuda de los cuales fue desgranando temas de Gracias intercalándolos con canciones clásicas de la música cubana. Sonaron Tres palabra s, Drume negrita y Dos gardenia s. Esta última se la dedicó al recientemente fallecido Ibrahim Ferrer, que participó con ella en el proyecto Buena Vista Social Club. La actuación puso de relieve que el Coliseo no es el recinto más indicado para este tipo de recitales, pero el espíritu juvenil de Portuondo y sus ganas de agradar mantuvieron vivo, a pesar del frío, un espectáculo para el que pidió en todo momento la participación de los presentes. Ya al final, el público retuvo a la cantante y ella interpretó a capela Silenci o. Y los asistentes la acompañaron .