Alfonso Molina se convertirá en una vía urbana integrada en la ciudad similar a la Castellana

La Voz

A CORUÑA

18 dic 2008 . Actualizado a las 11:28 h.

La concejala de Urbanismo, Mar Barcón, adelantó ayer algunas de las claves del documento inicial del PGOM que el profesor Joan Busquets presentará hoy a todos los coruñeses en una acto público previsto para las 20 horas en Palexco. Según explicó la socialista, las grandes actuaciones de transformación se harán en el entorno de las estaciones de San Cristóbal y de autobuses y en el ámbito portuario.

Respecto al primero, Mar Barcón recordó que la llegada del AVE obligará a transformar la estación de tren en una gran intermodal que contribuirá a crear una «nueva centralidad» en la que converjan ferrocarril nacional y regional, tranvía, autobús urbano e interurbano, bicicletas, taxis, turismos y peatones. Estará comunicada a través de una zona verde con el espacio que hoy ocupa la estación de autobuses, «lo que nos ayudará a conseguir que la llegada por Alfonso Molina se vaya convirtiendo paulatinamente de una vía de alta capacidad en una vía urbana». La concejala comparó este proceso con el que sufrió la avenida de la Castellana en Madrid, que pasó de ser la entrada de la ciudad a ser un lugar incluso de paseo y conexión entre barrios. «Esta es la ambición que tenemos para Alfonso Molina, desde los enlaces con la autopista hasta la propia estación de autobuses: ha de transformarse en la gran calle de A Coruña».

En cuanto a los espacios portuarios que se desafectarán (más de 100 hectáreas de suelo, es decir, un espacio mayor que las dos fases del polígono de Elviña) se plantea como la oportunidad para crear nuevos usos para el agua, impulsando los movimientos de pasajeros, y la continuidad para el actual paseo marítimo desde la Dársena hasta el puerto de Oza.

Otra zona de importante transformación será, según indicó Mar Barcón, el entorno de Penamoa y Bens. «En el documento inicial del PGOM se le encuentra un uso tanto para actividades productivas entre la tercera ronda y el barrio de Bens como para zonas verdes», explicó.

Esfuerzo de equipo

La concejala agradeció «el esfuerzo, la dedicación, el trabajo y la ilusión» que ha empleado «la familia» de Urbanismo en colaboración con el equipo redactor del documento inicial, que definió como «la hoja de ruta de la ciudad y el área metropolitana» para los próximos años. Añadió que se trata del Plan General «de la participación y de la transparencia, en un momento en el que se cuestionó el urbanismo por su opacidad o por generar cuestiones que desearíamos que no hubieran ocurrido». Prueba de este espíritu abierto del nuevo PGOM son las 126 propuestas recibidas y las 10.347 consultas realizadas a través de la página web del Ayuntamiento y que también fueron trasladadas al equipo redactor. Destacó que se trata de un plan «con vocación metropolitana desde sus inicios», en el que pudieron participar y hacer sus aportaciones responsables de otros municipios.

Una ciudad más confortable

La teniente de alcalde responsable del área de Urbanismo subrayó que el contenido del nuevo documento se basa en unos principios estratégicos que priman la movilidad, los espacios libres y la calidad urbana, para lograr una ciudad «más compacta y confortable», con mejores conexiones entre barrios y con el área metropolitana. También contribuirá a que A Coruña sea una ciudad «más sostenible, más atractiva, más humana y económicamente más equilibrada sin renunciar a que mantenga su carácter de ciudad emblemática y singular». En este sentido, Barcón indicó que el protagonismo no debe ser solo de los edificios, «sino también de los espacios urbanos y verdes», que permitan, por ejemplo, en un plazo de dos o tres años «ir andando desde el parque de Bens hasta el embalse de Cecebre».