Las obras en el nuevo centro de salud de Vilarmaior podrían concluir dentro de cuatro meses. «Para o ano novo esperamos que se cumpra o prazo», afirmó ayer María José Rubio Vidal, conselleira de Sanidade, durante una visita a los trabajos que se están realizando en el lugar de Armada, frente a la casa consistorial. La delegada de la Consellería de Sanidade en la provincia coruñesa, María Ausencia Tomé Martínez de Rituerto; la directora provincial del Servizo Galego de Saúde, Pilar Mata Freire; la gerente de Atención Primaria del mismo departamento, María Jesús Cerecedo Pérez; y el alcalde del Concello, Carlos Vázquez, acompañaron a la conselleira durante la visita.
El director de ejecución de las obras, Manuel Cuquejo González, uno de los aparejadores, mostró el estado actual de las tareas de construcción, encaminadas a conseguir «un centro de salud pequeño, de planta baja y muy bien dotado», caracterizado por un atrio de entrada con jardín que da acceso a las diferentes dependencias. María José Rubio destacó la «orixinalidade» de la edificación, que «dota de certa peculiaridade e personalidade propia ao centro», y se aludió a la necesidad de «liberar espacio no concello e atender aos cidadáns en mellores condicións», ya que por el momento reciben atención médica en una sala habilitada en el propio Concello de Vilarmaior.
El futuro centro médico poseerá «unha dotación por riba das necesidades da zona asignada», según la conselleira, y atenderá a más de un millar de habitantes con tarjeta sanitaria del municipio, de los que 357 tienen más de 64 años. El Servizo Galego de Saúde ha invertido más de 628.000 euros en el edificio, que dispondrá de más de 500 metros cuadrados repartidos en salas de espera, aseos, una sala para desarrolar el programa de la mujer, una consulta polivalente, dos consultas de medicina general, una consulta de enfermerías, oficios limpio y sucio, recepción, y un archivo de historias.
Las instalaciones han sido concebidas «en previsión das necesidades futuras», según María José Rubio, para realizar un «plan de mellora» mediante el que se incluye una plaza de personal administrativo. Los recursos humanos en atención ordinaria estaban formados en este concello hasta ahora por un médico general y un ATS. Con la incorporación del puesto de administrativo se evitará «que os cidadáns teñan que acudir a Miño», señaló la conselleira de Sanidade.
Espacio íntimo
El edificio, diseñado por el arquitecto Alfonso Penela y situado en una parcela triangular, cuenta con un esquema en L y pretende crear «un espazo íntimo» en continuidad con el entorno rural. Un armazón protege el local, que en su interior se caracterizará por transparencias formadas por cristaleras y espacios de ventilación. El nuevo centro estará además totalmente informatizado, lo que permitirá, entre otras cuestiones, que los usuarios obtengan cita con el especialista desde el propio recinto, así como acceso a la historia clínica informatizada y la implantación descentralizada del control de los tratamiento con anticoagulantes orales (Sintrom).