La carretera de O Burgo va a disfrutar esta semana de una serie de mejoras en su pavimentación que obligarán a cortar la vía, dejando libre para la circulación únicamente uno de sus carriles. Los trabajos y el corte de carriles se harán en horario nocturno para reducir al mínimo posible las molestias ocasionadas a los usuarios, máxime cuando se trata de una de las arterias de comunicación que mayor densidad de tráfico soporta de todo el área metropolitana de A Coruña.
Los trabajos forman parte del proyecto integral de mejora de la vía entre el puente de A Pasaxe y O Burgo. Se acometerán durante las noches de esta semana y se pretende que finalicen durante la madrugada del jueves al viernes. Para regular el tráfico, el Concello de Culleredo ha dispuesto un importante dispositivo policial, y también se colocarán semáforos de obra que controlarán el flujo de vehículos, dejando siempre libre uno de los carriles. Aunque los responsables saben que las molestias ocasionadas a los conductores serán inevitables, afirman que las obras tienen como objetivo posibilitar una mayor fluidez, una vez terminadas, entre el puente de A Pasaxe y O Burgo. Un tramo que pretenden convertir en «una auténtica travesía urbana». Para ello, la Consellería de Política Territorial va destinar más de un millón de euros, concretamente 1.024.812 euros.
Al margen de esta actuación, la Xunta tiene previstos dos proyectos más, explican desde el Concello de Culleredo, que podrían servir para aliviar definitivamente la congestión circulatoria en la zona. Por una lado, la redistribución del puente de O Burgo con la creación de un tercer carril, construyendo una pasarela peatonal por uno de sus márgenes.
Por otro lado, el gobierno autonómico también prevé la mejora, ya en fase de construcción, de la Cuesta de la Tapia, en el municipio de Cambre. Precisamente esta vía cambresa será cortada desde primera hora de la mañana de hoy, en su carril de subida, para continuar con esos trabajos de mejora. La circulación en dirección a la AP-9 se desviará desde la glorieta de O Temple por la calles Francisco Añón y Otero Pedrayo.
El proyecto que se ejecuta en Culleredo incluye la mejora de la señalización y el pavimento, la reposición de servicios en las zonas en las que sea necesario y la mejora de las intersecciones para facilitar las incorporaciones desde las distintas calles que desembocan en la AC-211. También se contempla la construcción de aceras, ampliación peatonal del puente sobre la vía del ferrocarril en O Burgo y la creación de cuatro rotondas. Entre esas intersecciones que se remodelarán están las de las calles Jorge Guillén, calle del Pasaje, avenida de O Portazgo, Moncho Reboiras, Fernando Pérez de Traba, Paz, Electo Carballo, As Brañas, Andrés Pan Vieiro, Sanjurjo de Carricarte, Largo Caballero, San Manuel y Salvador Allende. Las aceras se construirán, entre otros lugares, en la calle Ramón Cabanillas y la rotonda de Electo Carballo, en el margen izquierdo de la carretera en sentido O Burgo. Las rotondas proyectadas servirán para mejorar la fluidez del tráfico. Por último, la señalización se mejorará incluyendo el tramo de salida del túnel de As Xubias.