Las cooperativas triunfan en la milla de oro coruñesa

A CORUÑA

01 jun 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

La conocida como milla de oro coruñesa tuvo ayer competencia al instalarse seis cooperativas en la zona del Obelisco. Su éxito fue rotundo y en algunos de los puestos colgaban por la mañana carteles de agotado, sorprendentemente en el la zona más in, los productos del campo.

El tirón de esta convocatoria, creada bajo el programa educativo Semente, estaba en que los vendedores eran los alumnos de Aspace (Asociación pro Personas con Parálisis Cerebral), de Aspronaga (Asociación de Padres y Familiares de Personas con Discapacidad Intelectual de Galicia), del centro Santiago Apóstol y de los colegios Sagrada Familia y Víctor López Seoane. El otro atractivo de este mercado eran los productos artesanales que comercializaban.

La oferta era diversa. Desde salvamanteles con pinturas, bolsas de tela, distintos complementos de fieltro o bisutería a pequeñas obras de arte de xilografía. Sin embargo, lo que voló con más rapidez fue el café y las hierbas aromáticas, en las que misteriosamente se acabaron antes el tomillo, la menta y el orégano y solo quedaron, al mediodía, algunas bolsas de perejil, el producto que se vendía más barato: a 80 céntimos. La propuesta tecnológica corrió a cargo de alumnos del Víctor Seoane con una libreta con cedé incluido en el que reinterpretaban un cuento. También tuvo éxito la venta de plantas, mermelada, botellas con sal de colores y el apartado de globoflexia.

La recaudación, explicaban en la cooperativa Galichollos, se destinará en un 10% a la Cocina Económica y el resto a costear una fiesta para los participantes de los centros integrados en el proyecto, respaldado por Caixa Galicia y con el que el Concello pretende impulsar la cultura emprendedora. Para darle realismo al programa Semente, el teniente de alcalde, Henrique Tello, entregó a los cooperativistas una licencias de venta ambulante.