La gallega Elena Espinosa se estrenó en su nuevo ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural con un recrudecimiento de la guerra del agua, justo cuando se avanza en la solución de los problemas de abastecimiento que pudieran afectar a Barcelona. Unas horas antes de que la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, y la ministra se reunieran con el presidente de la Generalitat, José Montilla, los presidentes valenciano y murciano amenazaban con movilizaciones si el Ejecutivo acepta un trasvase del Ebro.
La vicepresidenta aseguró ayer que los gobiernos catalán y central siguen trabajando para garantizar el abastecimiento de agua a Barcelona y su área metropolitana, pero insistió en que lo harán «sin utilizar ningún tipo de trasvase». La opción que se está barajando es la de comprar derechos de uso de agua a los regantes, «como se ha hecho en otras comunidades». Insistió en que las alternativas que se están planteando son «las vías en las que este Gobierno ha trabajado siempre».
Subrayó que las medidas que se han implementado en otras comunidades han permitido proveer recursos hídricos «en momentos de dificultades y de sequía». «Lo hemos hecho a lo largo de la legislatura, hay medios diversos, y lo vamos a hacer para Barcelona», agregó. La ministra Elena Espinosa y José Montilla se reunirán hoy en Barcelona para intentar encontrar la solución definitiva al problema de abastecimiento de agua.
Amenaza de Camps
La búsqueda de soluciones a la crítica situación en Cataluña había provocado las amenazas de gobernantes regionales. El presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, anunció ayer que utilizará «cualquier tipo de iniciativa», incluidas las manifestaciones «a la escala que correspondan», para oponerse a la «humillación» que supondría un trasvase del Ebro para Barcelona.
Además, el presidente del Gobierno murciano, Ramón Luis Valcárcel, afirmó que si el Estado aprueba transferir agua a Cataluña «Murcia reclamará con todas sus fuerzas y legitimidad» que se trasvase agua del Ebro al resto de cuencas deficitarias.