Una búsqueda de gangas entre mucha competencia en Betanzos

A.?M. Castiñeira

A CORUÑA

La feria de oportunidades Mercabetanzos llenó ayer la ciudad brigantina de visitantes. Hoy sigue en la plaza García Hermanos

06 abr 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Los organizadores de Mercabetanzos querían contribuir a que la ciudad sea «un polo de atracción», dijeron el pasado jueves. Ayer, una simple mirada al interior de la carpa en la que se instaló esa feria de oportunidades servía para afirmar que lo lograron. El sol de abril, que calentó hasta los 24 grados centígrados y que invitaba a pasear o a tumbarse en la playa, no pudo con el mercadillo; se limitó a caldear el hervidero de gente se formó en él. Y así, el buen día también se notó en las terrazas próximas, repletas, y en el casco histórico.

Ni el Concello ni la asociación de comerciantes (padres de la iniciativa) se atrevieron a dar cifras exactas de asistencia, pero coincidieron en que Betanzos recibió ayer a más personas que cualquier día de la tradicional feria (1 y 16 de cada mes), que no es poco. «Varios miles», dijo la presidenta de Acebe, Antonia Anido, que reconoció: «Nos cogió por sorpresa».

Lo cierto es que no eran ni las once de la mañana (la hora prevista para la apertura de puertas) cuando una hilera de compradores ávidos tomaba posiciones en la plaza García Hermanos. Anido lo explicaba con un símil muy reconocible: «Parece el primer día de rebajas de El Corte Inglés». Los clientes de los 35 puestos que había en el mercado disfrutaron de lo lindo. Rebuscaron y muchos incluso encontraron: «¡Una cazadora de piel de 600 euros a 150!», se sorprendía un joven.

«Calidad»

En ese sentido, la presidenta de Acebe incidió en que la asociación ha solicitado a los empresarios que «adapten los precios pero que los productos sean de calidad, y lo han hecho».

Desde el punto de vista de los comerciantes, se trataba de terminar con los restos de la temporada anterior, y hubo quien se deshizo de ellos a tanta velocidad que al final de la jornada estaba estupefacto: «No sé qué voy a vender mañana», decía la responsable de uno de los stands después de agotar el género.

La primera jornada del mercadillo, que continúa hoy, la resumió Anido: «La gente está encantada, y los vendedores, muy contentos». Tanto es así, que el concejal de Comercio, Pablo Tomé, ya avanza que la iniciativa tendrá continuidad. «El año que viene seguro que se apuntan más comerciantes», dijo.