El chivato que indica el correcto despliegue de las ruedas permaneció apagado El aeropuerto activó su alerta local, aunque el avión pudo tomar tierra con normalidad
05 jul 2007 . Actualizado a las 07:00 h.El avión de la compañía Spanair que cubría ayer el vuelo 6066 entre A Coruña y Madrid obligó a poner en marcha del plan de emergencias del aeropuerto de Barajas al detectar el comandante del aparato un fallo en el tren de aterrizaje. La tripulación de la aeronave informó hacia las nueve de la noche a la torre de control del aeródromo madrileño de que el chivato que indica el correcto despliegue de las ruedas no se había encendido, por lo que los responsables del aeropuerto activaron la alerta local en las instalaciones en previsión de que el avión tuviese que tomar tierra sobre el fuselaje. Poco después se movilizaron los equipos de bomberos, personal sanitario y fuerzas de seguridad que contempla el protocolo de emergencias. El dispositivo se mantuvo durante una hora, hasta que el aparato, con 77 pasajeros a bordo, logró aterrizar sin mayores problemas y se dirigió desde la pista hasta la zona de párking con absoluta normalidad. Fuentes de la compañía aseguraron que el incidente no revistió ningún riesgo, ya que este tipo de situaciones se producen con relativa frecuencia. Según explicaron esas mismas fuentes, «en ocasiones, hay algún pequeño problema hidráulico o similar y los viajeros ni se enteran». A falta de que se investigue en profundidad en qué consistió el fallo, señalan como hipótesis que «es posible que después de que las ruedas bajasen correctamente, las compuertas no volvieran a cerrarse del todo, por lo que el chivato que indica el final de la maniobra permaneció apagado».