López Cobos dirige en A Coruña su segundo concierto de la temporada

César Wonenburger A CORUÑA

A CORUÑA

KOPA

El maestro zamorano se pondrá al frente de la Orquesta Sinfónica esta tarde El director del Teatro Real no descarta futuras colaboraciones con el Palacio

13 nov 2002 . Actualizado a las 06:00 h.

López Cobos, el director español que más entusiasmos levanta entre la parroquia de melómanos, regresa esta tarde (20.30 horas) al Palacio de la Ópera para ofrecer su segundo concierto de esta temporada al frente de la Sinfónica. El maestro de Toro ya dirigió la semana pasada un monográfico dedicado a Beethoven con dos de sus principales sinfonías, Sexta y Séptima . Ahora, además de Richard Strauss ( Macbeth y Así habló Zarathustra ), le toca el turno a W. A. Mozart ( Concierto número nueve para piano , con Javier Perianes). No es casualidad. Sostiene López Cobos que Haydn, Mozart y sobre todo Beethoven deben ser la columna vertebral de cualquier conjunto que se precie. Si algunos cantantes afirman que Mozart es un bálsamo para la voz, el de Bonn es el reconstituyente imprescindible para cualquier orquesta. «Me he llevado una sorpresa cuando los músicos de la Sinfónica me han dicho que casi nunca interpretan a Beethoven. Grave error. Beethoven y Haydn deben ser el pan nuestro de cada día para cualquier formación sinfónica, su principal medicina», aconseja López Cobos. Para el responsable del Teatro Real, «resulta trágico para nuestras orquestas que este repertorio lo hagan ahora casi en exclusiva los mal llamados conjuntos de instrumentos antiguos». Cobos cree que pensar que Mozart, Haydn o Beethoven sólo pueden ser interpretados por agrupaciones historicistas «es un dogmatismo, que se traduce en un terrible empobrecimiento para la vida de nuestras formaciones». No obstante, el maestro cree que es necesario revisar el modo de interpretar ahora a los compositores del clasicismo. «Hay que tocar esta música con el estilo adecuado, yo mismo he tenido que corregir mis visiones de las sinfonías de Beethoven», confiesa. Y añade: «Hay que limpiarlo de toda sombra de romanticismo, lo mismo que ocurre con Brahms; pero lo que de ningún modo debe ocurrir es que una orquesta sinfónica abandone este repertorio». López Cobos asumió recientemente la dirección musical del Teatro Real. Y no descarta que en el futuro el coliseo madrileño y el Palacio de la Ópera coruñés puedan colaborar en coproducciones de títulos líricos. «Debería estudiarse. Ahora mismo, la mejor manera de rentabilizar producciones es logrando acuerdos entre varios teatros». El maestro avanza cuáles serán los títulos que él mismo dirigirá en la próxima temporada del Real. «Abriré el curso con La Traviata de Verdi, en una nueva producción de Luca Ronconi, con la soprano Angela Gheorghiu y el barítono Renato Bruson. Y más adelante, haré La dama de Picas de Tchaikoivsky con Plácido Domingo». Entendimiento A propósito de la concesión del Premio Príncipe de Asturias de la Concordia a su colega, el director y pianista Daniel Barenboim, López Cobos opina que «la música ha servido desde siempre al entendimiento entre los pueblos». Para el maestro zamorano, «sólo hay que ver las orquestas españolas, donde conviven músicos de diecisiete nacionalidades distintas. Es un modelo al que todas las naciones deberían aspirar. Y se consigue a través de la música».