Latre desbordó el Palacio de la Ópera con la creatividad de sus imitaciones

A Carlos Latre llegó ayer al escenario del Auditorio coruñés como habitualmente lo hace al plató de Crónicas marcianas : buscando las carcajadas del público desde las propias butacas. El humorista comenzó la gala junto a los espectadores, dirigiendo su ironía a los asistentes, todo para romper el hielo en una velada que duró dos horas y que reunió en el Palacio de la Ópera a más de 1.700 personas. El lleno fue absoluto. Repetidas pausas Decenas de personajes cruzaron el escenario en busca de las risas del público; el obligado y constante cambio de registro provocó un buen número de pausas, que Latre resolvió simulando a través de los altavoces una conversación con el Rey. La charla amenizó las pausas entre imitación e imitación. Las mejores, las que llevaron a Rosa de Operación triunfo, a Pepe Navarro y a muchos de los personajes de Gran hermano al escenario. Ahí es donde el barcelonés encandiló verdaderamente al público coruñés, así como en el papel de la pitonisa Lola. En el espectáculo, en fin, Carlos Latre consiguió arrancar a cada momento los aplausos de los asistentes. Junto a su compañero Xavier Deltell, demostró que 1+1 no son dos ( como se denomina su gira), sino muchos más a base de fuertes dosis de imaginación.

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