El patrimonio militar, bajo mínimos

R.C. A CORUÑA

A CORUÑA

Defensa ha logrado grandes beneficios con la venta de sus inmuebles, aunque también favoreció el desarrollo urbano La reducción de los efectivos militares con base en A Coruña ha propiciado desde los años ochenta la venta de cuarteles y la desafectación de amplios terrenos en muy diversas zonas de la ciudad. El Ministerio de Defensa se ha embolsado varios miles de millones de pesetas al deshacerse de su patrimonio, en unas operaciones que, además, han favorecido el desarrollo urbano y la creación de importantes áreas de recreo, como el monte de San Pedro o Punta Herminia. La cesión del cuartel de San Amaro al Ayuntamiento completó el año pasado el programa establecido en el convenio firmado en 1984 entre el Gobierno y la Administración municipal, ya con Francisco Vázquez al frente de la alcaldía.

31 may 2001 . Actualizado a las 07:00 h.

En los últimos veinte años, A Coruña perdió más de 2.000 familias vinculadas a las Fuerzas Armadas. De hecho, la presencia militar se reduce en la actualidad al parque de vehículos de A Grela, la Comandancia de Obras, Capitanía General, el Gobierno Militar y el cuartel de Atocha, donde se alojan los soldados que sirven a estos departamentos administrativos. La reducción de efectivos militares conllevó, como es natural, la reconversión de los cuarteles, baterías de costa y demás bienes que estaban en propiedad del ministerio. Uno de los primeros inmuebles en caer fue el acuartelamiento de Zalaeta, situado frente al actual Museo de Belas Artes, que fue vendido para la promoción inmobiliaria. El último de la lista es el cuartel de San Amaro, que encarna además la doble cara del asunto: parte de la antigua instalación será para el disfrute público, con una plaza de similar tamaño a María Pita y un centro cultural, y otra parte revertirá en las arcas estatales, ya que Defensa subastó cinco parcelas edificables, por un valor superior a 1.000 millones de pesetas. El Hospital Militar, que fue vendido a la Consellería de Sanidade por 1.100 millones; las 109 viviendas de A Maestranza, que han de ser compradas o alquiladas por sus ocupantes, y el monte de San Pedro, traspasado al Ayuntamiento por 115 millones, también han contribuido a engordar el tesoro del Estado. Este gran parque público, junto a Punta Herminia y toda la zona de A Maestranza, ahora en obras, son los principales exponentes del efecto que la reducción de las unidades militares ha tenido en la mejora de la calidad de vida.