Mañana se cumple un siglo del comienzo de las obras del tren Ferrol-Betanzos, inaugurado en 1913

F.VARELA / P. RODRÍGUEZ FERROL/BETANZOS

A CORUÑA

ARCHIVO NORES CASTRO

Cien años después, la reivindicación de infraestructuras terrestres viarias siguen en el primer plano de las aspiraciones del noroeste Mañana se cumple un siglo del comienzo oficial de las obras de construcción del ferrocarril Ferrol-Betanzos. El 6 de septiembre de 1900 viajaron a Ferrol la Reina Regente María Cristina de Austria, acompañando al Príncipe, su hijo, todavía un niño, para proceder a la colocación de la primera piedra. El aniversario sirve para recordar que las reivindicaciones de infraestructuras comunicacionales (terrestres y marítimas) continúan en el primer plano de los objetivos de la ciudad departamental. Las obras inauguradas por la Infanta no concluirían hasta 1913. La obra fue el primer ejemplo español de construcción de una línea ferroviaria por parte del Estado y el segundo de vía ancha cuya explotación fue realizada directamente también por la Administración pública. Por tratarse de una línea cuya existencia era debida, exclusivamente, a motivos estratégicos.

04 sep 2000 . Actualizado a las 07:00 h.

Uno de los más incansables promotores de la línea fue Frutos Saavedra Meneses, diputado por Pontedeume, que llegaría a ser Director General de Obras Públicas. Desde ese cargo contribuyó a la aprobación de la primera Real Orden, de 1.864, que autorizaba los primeros estudios para un ferrocarril que enlazará Ferrol y Galicia con el resto de la península. A medida que avanzaban las obras de la línea de Palencia a A Coruña _en 1875 se inauguraba el servicio público entre A Coruña y Lugo_ los Ayuntamientos Constitucionales de Betanzos, Ferrol y Pontedeume enviaron repetidas instancias al Ministerio de Fomento solicitando la construcción de la línea Betanzos-Ferrol, e incluso proponiendo su inclusión en la nueva subasta de la línea Palencia a A Coruña, que tuvo lugar tras la quiza de la compañía del Noroeste y la consguiente incautación por parte del Estado. Golden age Aunque nos hallábamos en aquellos años en lo que se llamó la golden age del ferrocarril (Europa y Norteamérica competían en número de kilómetros de tendido férreo), lo cierto es que el ferrocarril de Betanzos a Ferrol fue, sin duda, el más lento de cuantos se abrieron en España. A pesar de todo, el polígrafo de Pontedeume Couceiro Freijomil, en su célebre historia de la villa, resalta a Frutos Saavedra como «eficaz promotor» del desarrollo eumés, merced al avance del tren. Hay que recordar que, tras sucesivos intentos infructuosos, las subastas quedaron desiertas por lo que fue el Estado el que acometió las obras. Hasta 1985 no se habían verificado las expropiaciones. La construcción de las obras de fabricación se adjudicación en 1896 al contratista José Lorca Torrijos, con un presupuesto inicial de 15.343.359 pesetas. Los trabajos avanzaban con mucha lentitud pues en 1902 se trabajaba en unos 23 kilómetros mientras que en la veintena restante no se habían iniciado todavía las obras. De los cuatro túneles previstos se habían terminado dos y se pretendía que la totalidad del proyecto concluyera en los primeros meses de 1904. Tras la agilización de la terminación de la línea, en 1912 ya podían circulas los trenes hasta Ferrol. Ese año se abrió provisionalmente al tráfico para los trenes con los invitados a la botadura del España, el 4 de febrero. Entre ellos, el tren con Alfonso XIII y la reina Victoria Eugenia.