Científicos de Cambridge logran rejuvenecer 30 años la piel de una mujer

Íñigo Gurruchaga COLPISA / MADRID

CIENCIA

Es un primer paso en la investigación de métodos seguros para regenerar tejidos del cuerpo humano

08 abr 2022 . Actualizado a las 19:17 h.

Investigadores del Instituto Babraham, en la ciudad inglesa de Cambridge, han logrado rejuvenecer tres décadas las células de la piel de una voluntaria. El experimento se basa en técnicas utilizadas para la clonación de la célebre oveja Dolly y encierra la promesa de tratamientos clínicos que permitan extender en el tiempo una vida sana, mediante el rejuvenecimiento de otros tejidos del cuerpo humano.

En declaraciones a la BBC, el director del instituto, Wolf Reik, ha advertido de que es necesario superar barreras científicas para que la técnica descubierta en el laboratorio pueda aplicarse a las pruebas clínicas. Pero su equipo, en el que trabajan científicas españolas, ha logrado rejuvenecer por primera vez una célula humana, tras resultados positivos en ratones.

El equipo investigador está especializado en epigenética. Experimentan posibilidades de reprogramar las células, inspirándose en los mecanismos de activación o neutralización de los genes de nuestro código DNA por compuestos químicos orgánicos, para especializarlas en las tareas que dan a la célula su papel en el organismo.

En 1996, científicos del Instituto Roslin, en Escocia, presentaron a Dolly, una oveja nacida mediante la transferencia del núcleo extraído de la célula en una glándula mamaria. Era el primer mamífero clonado a partir de una célula adulta de una parte cualquiera del organismo. El objetivo cumplido de los científicos fue la obtención de embriones, de células madres, partiendo de una célula somática.

Obstáculos

Esa reversión en el tiempo del proceso biológico borra las funciones adquiridas por la célula, pero los científicos han tenido dificultades para dar la especialización deseada a esas células madres inducidas. Shinya Yamanaka, premio Nobel en 2012, creó un método de borrado y reprogramación centrado en cuatro genes clave para convertir células maduras en «pluripotenciales», capaces de ser programadas.

El método de Yamanaka lleva 50 días. Diljeet Gill experimentó en Cambridge con la detención de ese proceso a los 13 días. Su momento eureka llegó con la confirmación de que las células habían conservado sus características. Las mediciones del reloj epigenético y del transcriptoma (suma de móleculas de ARN presentes en la célula) confirmaron una edad 30 años menor que los datos celulares originales.

«Esta investigación está en su fase inicial», asevera el doctor Reik. La esperanza de tratamientos con células madre que revolucionarían la medicina aún no se ha cumplido y este descubrimiento contiene también la posibilidad de un gran avance. Según Gill, la prioridad es entender mejor los mecanismos que han deparado este resultado. Los obstáculos son múltiples, desde evitar la producción de cáncer a la emulación en células de otros tejidos.