El estudio, publicado en el último número de 2015 de la revista científica Evolutionary Psychological Science, ha sido realizado por expertos en el área de la selección sexual. Y para alcanzar las referidas conclusiones efectuaron un estudio de campo consistente en instalarse en un buffet libre -para que la capacidad económica no fuese un factor condicionante- de comida típicamente italiana -a saber pizzas y ensaladas- y espiar lo que comían los clientes de las mesas vecinas a los que posteriormente se les abordaba de camino a la caja registradora para que respondiesen un sencillo cuestionario con el que valorar si se habían excedido y en qué medida con respecto a una comida normal.
Sabido esto, siempre puedes optar por comprobar la reproducibilidad del experimento y, en consecuencia la fiabilidad de sus conclusiones, en la próxima cena de empresa.