Este no es el objetivo de la investigación, de carácter más básico, pero sus conclusiones sí pueden ayudar, y mucho, a los científicos de todo el mundo que trabajan de forma más aplicada en este campo. «Agora que podemos ver qué ocorre no interior dunha molécula cando recibe unha carga eléctrica podemos chegar a entender este proceso e a dominalo nun futuro, co que se podería aplicar a procesos que sexan interesantes para mellorar a calidade de vida das persoas», precisa el científico.
La fotosíntesis artificial aún se ve lejana, o quizás no tanto, pero una aplicación que sí puede estar más cerca es el perfeccionamiento del proceso por el que la luz se convierte en energía eléctrica en las células fotovoltaicas, lo que conduciría a obtener electricidad de forma más barata y sin generar emisiones contaminantes.