Los pigmeos de la India tienen genoma de un homínido extinto

Sara Carreira Piñeiro
sara carreira REDACCIÓN / LA VOZ

CIENCIA

Árbol evolutivo de la evolución humana
Árbol evolutivo de la evolución humana La Voz

Un estudio incide en una única salida del «sapiens» de África, incluso al Pacífico

26 jul 2016 . Actualizado a las 16:17 h.

Tres cosas nuevas y cada cual más importante que la anterior. Esto es lo que demuestra el trabajo liderado por el biólogo y antropólogo catalán Jaume Bertranpetit y que se publicó ayer en Nature Genetics: primero, que solo hubo una gran salida de África, aquella que extendió hace unos 80.000 años a los Homo sapiens modernos por todo el mundo; segundo, que la introgresión, es decir, la fusión de los sapiens con otros homínidos hoy extintos (como los neandertales), podría ser algo más general de lo esperado, ya que el trabajo demuestra que sucedió en la población actual de las islas de Andamán; y tres, que la baja estatura de los pigmeos que hay en estas islas, en el golfo de Bengala, no es fruto de la herencia de una especie humana antigua, sino pura adaptación darwiniana.

Estas conclusiones se consiguieron después del estudio genético de sesenta individuos contemporáneos indios y diez personas actuales de las poblaciones de las islas Andamán. Los habitantes de ese archipiélago eran de las tribus jarawa y onge, y en ellos se encontró un pequeño rastro, un 1,5 % del genoma, de una especie homínida ya extinta, con ancestros comunes con neandertales y denisovanos, pero diferente a ellos. En el trabajo no se identifica de qué especie se trata ni de cuándo ocurrió la fusión, aunque es posible que sea el Homo erectus o una especie china arcaica, y la mezcla pudiera haber tenido lugar en el sudeste asiático. Tampoco se ha podido determinar, a pesar de que se buscó con ahínco, que ese 1,5 % del genoma heredado del otro grupo humano le diese a los andamanenses la baja estatura y las condiciones de pigmeo.

En cuanto a lo que sí se demuestra con este estudio -en el que participa el Instituto de Biología Evolutiva (IBE, un centro de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) y el CSIC) junto al Instituto Nacional de Genómica Biomédica de la India- es que los sapiens que se instalaron en el sudeste asiático tuvieron relaciones sexuales y descendencia con otros homínidos diferentes, un grupo escindido miles de años antes de la rama que va al humano moderno.

El siguiente paso es esperar a la secuenciación del genoma de un ancestro asiático que un grupo investigador está realizando en Leipzig. Los datos que ofrezcan se podrán cruzar con el genoma de jarawas y onges para encontrar más respuestas al enigma de la expansión humana.