Ha bastado un mes de trabajo para que el técnico Javier Calleja, en su irrenunciable compromiso de obtener la mejor versión de cada uno de sus jugadores, haya sabido corregir la errática trayectoria del Levante Unión Deportiva, con una plantilla en plena madurez y formada en su mayoría por el bloque que a punto estuvo lograr la permanencia en la máxima categoría la temporada anterior.
Un idilio entre Javier Calleja y su colectivo cuyas excelentes sensaciones dieron comienzo en la paradisíaca isla de Ibiza remontando en inferioridad numérica un encuentro muy difícil. A buen seguro, ambas partes sueñan con envejecer juntos deportivamente.
Con una decidida apuesta por el esquema de juego 1-4-3-3 y un estilo de juego amparado en el excelente criterio a la hora de alternar juego combinativo con desplazamientos precisos en largo hacia perfiles exteriores en los que resulta determinante la velocidad, el desequilibrio en duelos individuales y la verticalidad amparada en la calidad y elevado nivel de jugadores propios de categoría superior. Con el añadido de una gran efectividad de sus transiciones ofensivas favorecida por la precisión de los pases interiores, la constante generación de superioridades numéricas en banda derecha y el brillante juego aéreo ofensivo convierten a los levantinistas en el principal favorito al ascenso de categoría.
En fase defensiva, hacen uso de una presión muy trabajada en terreno adversario que convierten en rápido repliegue defensivo de forma inmediata en caso de no ser efectiva, con cierre de espacios que dificulta la progresión del adversario. Quizá a este nivel, se echa en falta una mayor contundencia en la parcela central, que favorece al oponente el aprovechamiento de segundas jugadas, un juego aéreo mejorable en esta fase y cierta vulnerabilidad en distancias excesivas entre laterales y centrales.
En la habitual alineación inicial, el técnico de raíces complutenses pone en liza a Cárdenas en portería, línea defensiva con Son y Álex Muñoz en los laterales y Róber Pier y Vezo como centrales, una línea de creación en la que parecen fijos Iborra y Campaña, acompañados de Joni Montiel, Pepelu o Pablo Martínez. En línea de ataque, De Frutos y Róber Ibáñez o Brugué en bandas como estandartes de ese fútbol de calle que proclama y defiende Javier Calleja, con Bouldini, en excelente momento de forma, como principal referencia ofensiva. Soldado, Postigo, Wesley y Sarrachi también están gozando de una presencia importante en el campeonato.