El Lugo cae ante el Real Madrid Castilla en su test más físico: 1-2

I. MEITÍN BUJÁN

CDLUGO

xaime ramallal

La mayor velocidad y precisión del filial madridista decidió el encuentro en Viveiro

03 ago 2022 . Actualizado a las 21:28 h.

El Club Deportivo Lugo fue derrotado por el Real Madrid Castilla en su partido de preparación más exigente a nivel físico. Los chavales del filial madridista volaron sobre el césped de Cantarrana, poniendo bajo sospecha la punta de velocidad de un equipo lucense que no acaba de tapar sus grietas defensivas ni de resolver sus dificultades para hacer goles.

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Mientras muchos espectadores aún estaban más pendientes de las indicaciones de Raúl González en la banda que del desarrollo del partido y otros trataban de reconocer al exdeportivista gallego Noel y a Theo Zidane -hijo del legendario futbolista francés-, el filial madridista se adelantaría en el marcador. El gol fue el resultado de la mejor puesta en escena de los blancos, que iniciaron el partido con más intensidad que los albivermellos, un tanto apáticos en el arranque. Hernán Pérez apostó en este nuevo ensayo, el penúltimo del calendario estival, por una alineación en la que sorprendió la suplencia de Ángel Baena -la primera de la pretemporada- y la reaparición de Xavi Torres, inédito desde el enfrentamiento en Foz ante la Ponferradina. El mediocentro de Jávea ejerció de enlace entre la defensa y una línea de cuatro por delante con Idrissa Thiam y Moyano en las bandas y Marc Carbó y Señé por dentro. Un partido más, Manu Barreiro fue la referencia ofensiva.

Tras unos primeros compases en los que el Castilla parecía jugar con el acelerador pisado a fondo y el Lugo al ralentí, las fuerzas se igualaron después del gol de Álvaro Rodríguez como consecuencia de un rechace de Sequeira en un disparo de Peter. El 7 madridista asombró al personal por su esfuerzo y, sobre todo, por su clase, que volvió a poner de manifiesto en el 0-2. Filtró un pase medido que culminó con calidad Arribas, otro de los que más impresionó. Para entonces el Lugo ya se había estirado y había enseñado discretamente sus garras y su superioridad en el juego aéreo. Flirteó con el gol en un par de cabezazos de Señé y Jesús y en un disparo desde fuera de Sebas Moyano. El Castilla fue perdiendo ímpetu ofensivo, pero generaba pánico y desconcierto en la retaguardia lucense en cada salida. Cuando solo quedaban segundos para el descanso, Señé dio vida al Lugo rematando de cabeza en el segundo palo el centro medido de Calavera.

La segunda mitad siguió por unos derroteros prácticamente iguales a los de la primera. En un duelo sin tregua, con poco de amistoso y en el que algún jugador albivermello se jugó la expulsión, el Castilla imponía su mayor intensidad y velocidad para pisar más el área contraria que un Lugo que, pese a todo, malgastó buenas situaciones para empatar. Y jugando en inferioridad numérica desde el minuto 73 porque a Manu Barreiro no le permitieron regresar al terreno de juego, después de ser sustituido, para relevar al lesionado Pablo Clavería —en Chaves sí había podido hacerlo Zé Ricardo—. En el tramo final, Álex Ramos tuvo la más clara de los lucenses y los madridistas reclamaron dos penaltis.

LUGO: Patrick Sequeira, Jordi Calavera, Jesús (Miguel Loureiro, min 63), Neyder Lozano, Luis Castro, Xavi Torres (Dani Vidal, min 36), Marc Carbó, Señé, Idrissa Thiam, Sebas Moyano y Manu Barreiro.

Once de la segunda parte: Sequeira, Torrado, Jesús, Alberto, Zé Ricardo, Dani Vidal, Juanpe, Clavería, Idrissa (Álex Ramos, min 68), Baena y Manu Barreiro (Cuéllar, min 68)

CASTILLA: Mario de Luis, Vinicius Tobias, Obrador, Carrillo, Rafa Marín, Villar, Peter, Theo Zidane, Álvaro Rodríguez, Arribas y Noel. También jugaron: Lucas, Álex Jiménez, Leiva, Manuel Ángel, Pablo Ramón, Bruno, Alcazar, Mario, Gonzalo y Latasa.

GOLES: 0-1, min 8: Álvaro Rodríguez. 0-2, min 39: Arriba. 1-2, min 45: Señé.

ÁRBITRO: López Vila, del colegio gallego. Mostró la cartulina amarilla a Zé Ricardo, Miguel Loureiro y Alberto Rodríguez.

INCIDENCIAS: Partido disputado en el campo de Cantarrana, en Viveiro, con unos 2.000 espectadores en las gradas. Los equipos hicieron el pasillo de honor a los cadetes del Viveiro