El presidente del Lugo se congratula de la transformación del equipo tras la llegada de Albés: «Esa energía y ese aire fresco que trae ya está calando en la plantilla»
22 abr 2021 . Actualizado a las 17:54 h.Como había ocurrido con Eloy Jiménez y Juanfran García, artífices de las dos últimas permanencias, el presidente del Lugo cree haber dado otra vez con la tecla apostando por Rubén Albés. «Estamos ante un período ilusionante. El semblante del equipo es otro, ya se ve alegría y muchas ganas de trabajar. El cambio de entrenador nos va a dar oxígeno y vida. Esa energía y ese aire fresco que trae Albés ya está calando en la plantilla», destacó Tino Saqués, seguro de que el equipo superará enseguida el bloqueo que lo ha arrastrado hasta los puestos de descenso. «Faltan todavía siete partidos, 21 puntos que son más que suficientes para luchar. Uno de los aspectos más positivos es que veo a la plantilla con ganas de repetir la hazaña de las últimas temporadas. Los futbolistas creen en Albés, están recuperando la confianza y estoy convencido de que vamos a lograr la permanencia».
Son muchos los aficionados que le reprochan a Saqués la destitución de Nafti cuando el equipo estaba bastante alejado del pozo. Y esto fue lo que dijo al respecto: «No miramos hacia atrás. El cambio vino dado por una trayectoria negativa y creemos que no fue una equivocación, aunque no llegaron los resultados. A veces, el trabajo no lo da todo».
El Lugo fue a peor con Luis César. En ocho partidos no consiguió más que tres puntos y fue perdiendo altura hasta verse en la zona de descenso. Saqués cree que en esta ocasión el cambio está más que justificado. «No fue plato de buen gusto destituir a Luis César. Ninguna destitución es fácil... Creemos que en detalles se complicó la etapa de Luis. Vimos que, sin cambio de aires, no sería posible modificar la situación», valoró el presidente quien concluyó diciendo: «Es la primera temporada con cuatro entrenadores, pero los cambios son normales en el fútbol».