Rubén Albés empieza a cambiarle el semblante al Lugo

I.M.B.

CDLUGO

ALBERTO LOPEZ

El nuevo preparador ve «cada día mejor» a un equipo que encontró «triste» y al que considera muy capaz de salvar la categoría

22 abr 2021 . Actualizado a las 14:27 h.

Rubén Albés ha comparecido por primera vez en la sala de prensa del Ángel Carro para ser presentado como nuevo entrenador del Club Deportivo Lugo. Lo hizo junto al presidente, Tino Saqués, quien lo definió como un técnico «enérgico y gran comunicador». «Es el perfil que necesitamos para sacar al equipo del bloqueo mental que sufre», apuntó el mandamás como introducción a un acto en el que el flamante preparador albivermello reconoció que se encontró un plantel «triste, jodido» y mostró su total confianza en sacar adelante la difícil papeleta que tienen por delante. «Ya hemos empezado a trabajar la recuperación de la autoestima, ese es el primer objetivo, que los jugadores vean lo buenos que son. El primer día estábamos tumbados, el segundo en cuclillas y hoy ya estamos de pie. Veo al equipo cada vez mejor, con ganas de ganas de ganar partidos y de darle la vuelta a la situación«, manifestó Albés.

Con el Lugo afrontará su primera experiencia en el fútbol profesional español como entrenador principal, después de haber sumado experiencia en Segunda División B y también en la Primera división rumana. «He tenido experiencias parecidas, y he podido sacar el resultado buscado. Tanto en España como en Rumanía lo hemos logrado. Se repiten situaciones y vamos a tratar de aprovecharlo», añadió el técnico rojiblanco, quien entiende que los apuros vividos por el Lugo en las últimas temporadas también les pueden resultar útiles en un tramo final de liga tanto o más exigente que los anteriores. «Veo todo desde el punto de vista positivo. Tiene mucho mérito la trayectoria de este equipo en la categoría, no se da valor a lo hecho, creo. Esa capacidad de sufrir nos ayudará en momentos críticos, esa fuerza es algo muy positivo».

El joven técnico rojiblanco apuntó además que está incidiendo en lo psicológico, porque «cuando un equipo se siente fuerte es muy difícil de derrotar», y en «recuperar esa confianza que se perdió» por el camino. También aseguró que cada uno de los jugadores debe tener «los roles muy claros» y afirmó que está trabajando sobre los «defectos individuales y colectivos» para «modificarlos y reducirlos». «Me gustan muchísimo los retos y este es muy grande, con un equipo gallego en Segunda. Lo siento como una oportunidad para mostrar nuestro trabajo», comentó. El técnico se mostró convencido de que «todo el mundo va a trabajar» en el Lugo, de que «no va a rendirse nadie», porque es algo que lo ha visto «en las caras de los jugadores». «Si somos capaces que la afición y toda la estructura de club tenga ese pensamiento, lo tenemos ganado. Fuera de Lugo, piensan que estamos muertos. Ahí está nuestra parte de callar muchas bocas», aseguró.