Los locales sufrieron en la primera parte y mejoraron en la segunda, cuando Juanfran alineó a los presumibles titulares
05 sep 2020 . Actualizado a las 20:40 h.El Lugo perdió en la tarde de ayer un partido en el que el equipo mostró dos caras. La mala, la de la primera mitad, en la que el Mallorca fue el claro dominador del partido y remató con un gol justo antes del descanso. La buena, la segunda parte, en la que el equipo supo presionar mucho más arriba y empezó a crear ocasiones de gol desde ambos costados.
Esta diferencia tiene su explicación en los jugadores que había sobre el campo. Tal y como adelantó Juanfran en la rueda de prensa del viernes, el Lugo saltó al terreno de juego del Municipal de O Ceao con un once inicial plagado de jugadores no habituales. A pesar de empezar fuerte, a los pocos minutos el Mallorca ya tenía el control del partido y se jugó a lo que quisieron Lago Junior, que fue un puñal por la banda derecha del conjunto balear, y Aleix Febas, que volvió a demostrar que puede ser uno de los jugadores a tener en cuenta en la zona alta de la Segunda División esta próxima temporada.
El Lugo probó diferentes esquemas a lo largo del partido, empezando con un 4-3-1-2 en el que Hugo Rama actuaba como enganche entre el centro del campo y la delantera. A pesar de su esfuerzo, el santiagués no pudo conectar con sus compañeros en un partido en el que le costó recibir balones en buenas condiciones en las zonas donde más cómodo se siente. No hay dudas de que será uno de los activos más importantes de la plantilla para Juanfran esta temporada.
Luis García Plaza, entrenador del Mallorca y buen amigo de su homólogo en el Lugo, planteó un esquema de cuatro centrocampistas abiertos, y volcó su juego sobre el lado derecho, en donde Lago Junior hizo estragos. Múltiples llegadas suyas a línea de fondo provocaron las ocasiones más claras del equipo mallorquín en la primera mitad. El Lugo, por su parte, resistía en campo propio esperando un error del rival que nunca llegaría.
Lo que sí llegó fue el gol del Mallorca al filo del descanso. Iván Bravo enganchó un balón perdido en la frontal del área con la pierna izquierda que rozó en un defensor, que cambió completamente la trayectoria del esférico. El balón acabó dentro de la portería sin que Ander Cantero tuviese ninguna opción de impedirlo.
Tras el descanso, el Lugo salió con una actitud mucho más positiva. Los cambios que realizó Juanfran a partir del minuto 55, cuando se empezaron a incorporar los jugadores más habituales —Carlos Pita, Iriome o Herrera—, cambiaron la dinámica del partido y animaron al Lugo a encerrar a su rival como lo habían hecho con ellos en el primer tiempo.
Sin embargo, a pesar de haber estado apretando hasta el último minuto, el equipo local se quedó sin premio y terminó el partido por debajo en el marcador gracias al solitario gol de Bravo. El Lugo, por lo tanto, ha perdido tres de sus cuatro partidos de pretemporada. En el lado positivo, llegará a al debut de liga en Fuenlabrada el próximo domingo sin ninguna baja significativa, algo que quería evitar a toda costa Juanfran.
