Ya hay padres que aparcan sobre las zonas verdes y hasta en doble fila en Ramón Ferreiro
20 sep 2017 . Actualizado a las 22:46 h.Son las dos de la tarde. A esa hora comienza el caos para los peatones en Lugo. Durante media hora es mejor quedarse en casa en vez de caminar por la calles Santiago, Ángel López Pérez, Tilos, todo Ramón Ferreiro e incluso Pintor Corredoira. Mandan los coches de los papás de los escolares y estudiantes que, aún pudiendo, no caminan. El resultado del control efectuado ayer a medio día en tan solo tres viales dio el siguiente resultado: 79 coches invadiendo aceras, jardines, paradas de bus y también de discapacitados. Agentes en esas calles: cero. Multas: cero. Así es el Lugo que «ampara» a peatones y ciclistas. Los papás y sus coches mandan. Imponen su ley sobre los policías locales que no aparecen porque no les mandan dedicarse al cometido de impedir el récord de infracciones.
Si muchos papás que llevan y traen a sus hijos de las «Pepas» aparcan a su antojo, los que van a los Maristas no se quedan cortos. Ayer, sobre las dos de la tarde, había 19 coches en la acera izquierda de Ángel López Pérez y dos en el aparcamiento de personas con discapacidad.
Ramón Ferreiro parecía el aparcamiento de una concurrida verbena. Había hasta dobles filas. No quedaban huecos en las paradas de bus. El número de coches mal aparcados, incluyendo los que estaban en Pintor Corredoira, ascendía a 35.
Siguiendo el recorrido del caos, faltaba por pasar el Colegio de María Auxiliadora. En total, 23 coches sobre la línea amarilla y solo un carril para la salida de los autobuses interurbanos. Una buena parte de los infractores estaba frente a la sede de Tráfico. En esta zona un padre sobrepasó la raya continua para aparcar su vehículo.