Zas acelera para empezar la obra del tanatorio el 1 de enero del próximo año

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado CEE / LA VOZ

ZAS

SANTI GARRIDO

Los 454.484 euros del proyecto, un 10 % del presupuesto anual, saldrán del Concello

21 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El pleno de Zas, con los votos del gobierno y la abstención del PP, levantó ayer el reparo de intervención y aprobó el proyecto básico de construcción del tanatorio municipal. Estará en una parcela junto al campo de fútbol con salida a la carretera general y tendrá una superficie de 381 metros construidos. El dinero, 454.484 euros saldrá íntegramente de las arcas municipales, lo que supone más del 10 % del presupuesto de Zas para el año 2019.

Hasta ahí está lo relevante para los vecinos de lo que dio de sí el pleno extraordinario de ayer convocado precisamente para este fin. El resto fue un espectáculo muy poco edificante, que incluso rozó lo grotesco, con el alcalde restregándole al portavoz del PP que es el quien se sienta en la silla presidencial del pleno, mientras lo acusaba de estar buscando algún resquicio legal para boicotear el proyecto y ensombrecer con su actitud lo que es un gran día para la localidad, que incluso preveían celebrar «con algo de champán».

La cuestión de fondo, por más que se lo echasen en cara uno al otro y ninguno lo asumiese en primera persona, es que para el alcalde, Manuel Muíño, es un tanto electoral importante porque se trata de un servicio muy demandado y para el líder del PP, David Gómez, se trataba de un objeto de crítica primordial, debido al tiempo que la obra lleva prometida y todo lo que se retrasó. De ahí que -no se sabe lo que se pudieron decir en la comisión justo antes del pleno-, pero, desde luego, sirvió para que Muíño iniciase la sesión a la defensiva y con una dureza inusual. «Parece que se lle acordan os votos», «a súa oposición é nociva» o «déixolle falar eu que son o alcalde», fueron algunas de las expresiones que le espetó a Gómez en un ambiente de mucha sobreactuación, incentivada por la inusual presencia de medios.

Cierto es también que los argumentos del PP para abstenerse, centrados en que votarían a favor si se cumpliese «cos requisitos legais» parecen más bien pobres, porque tanto el reparo de intervención como los informes contrarios de secretaría a los que refirieron tienen que ver, básicamente, con que el Concello todavía no ha declarado como municipal el servicio de tanatorio y con que no tiene la parcela registrada a su nombre. Cuestiones poco menos que anecdóticas y fácilmente subsanables como trató de explicar el concejal Germán Pérez, aunque ni Gómez, ni mucho menos Muíño, estaban para atender a razones.

En definitiva, el tanatorio de Zas pisa el acelerador y la campaña electoral, por lo visto, también.

El proyecto obliga al gobierno local a que, este vez, apruebe a tiempo los presupuestos

El gobierno local tiene que aprobar los presupuestos para el 2019 sí o sí antes de final de este año si quiere cumplir con sus propios plazos y que la obra del tanatorio se inicie el 1 de enero, ya que el dinero -hasta ahora nunca se había dicho públicamente- estará consignado en ese documento. No deja de ser una novedad porque los concellos de la zona, y no solo el de Zas, no tienen precisamente por costumbre sacar con antelación sus previsiones de ingresos y gastos. A partir de ahí el proyecto, como detalló ayer el alcalde al término del pleno, tiene un plazo de ejecución de ocho meses, aunque uno de los criterios que puntúan para hacerse con el contrato de la obra es precisamente la reducción. Es decir, no estará para las elecciones, pero casi.