Prohibido el consumo en el interior de bares: Vimianzo entra en el nivel más alto de restricciones por el covid

Caterina Devesa CARBALLO / LA VOZ

VIMIANZO

El bar London de Vimianzo cierra temporalmente mientres duren las restricciones
El bar London de Vimianzo cierra temporalmente mientres duren las restricciones BASILIO BELLO

En los restaurantes el aforo es del 50 %. Así reaccionan los hosteleros a las nuevas medidas

02 nov 2020 . Actualizado a las 19:57 h.

Si el viernes los vecinos de Vimianzo recibieron un jarro de agua fría tras comunicar Sanidade el cierre perimetral del municipio, este sábado la jornada no fue mejor, ya que el DOG recogió ayer la entrada del Concello en el nivel tres de restricciones, una medida que ya había avanzado la alcaldesa, Mónica Rodríguez, que pide a los ciudadanos «extremar a prudencia».

Los datos, que reflejan 59 positivos por covid en los últimos 14 días, han llevado al comité clínico a endurecer las medidas. De esta forma, desde hoy y por un período de catorce días, aunque dentro de siete jornadas Sanidade revisará las restricciones, los restaurantes no podrán superar el 50 % de su capacidad en el comedor. Esto, unido a la imposibilidad de servir dentro de bares y cafeterías, supone un nuevo varapalo para los hosteleros, que en las terrazas solo podrán usar la mitad de las mesas. «Non imos abrir, porque con este clima non compensa traballar só coa terraza», apunta Elvira Soto, del bodegón A Lareira. En líneas similares se manifiestan desde el bar London, que sirve bocadillos y sándwiches. «Con estas medidas non podemos abrir. É un pau porque imos ter pechado case medio mes», indica Maiko Pérez, que añade: «O local é noso, pero hai que pagar o fútbol, que xa son 400 euros ao mes, e o resto dos gastos».

En el caso de los restaurantes, que deben reducir sus mesas a la mitad, la medida supone un parón de la actividad. «Non temos reservas, as que tiñamos para esta fin de semana canceláronse porque o Concello está pechado», comenta Francisco García, del restaurante O Cabral ,de Baíñas. Precisamente allí, la parrillada Hermida, se mantiene cerrada tras dar su propietario, José Manuel Hermida, positivo. «Estou en corentena até o día 6 e logo con todo isto non sei se abriremos ou que», indica el hombre.

Más medidas

El DOG establece además una bajada del aforo de ceremonias religiosas y civiles, que deben respetar un máximo de 50 personas al aire libre o de 25 en lugares cerrados. En academias, autoescuelas y centros privados de enseñanza no reglada se pueden impartir clases, siempre que no se supere la capacidad del 50 %.

En cines, teatros, auditorios, circos y similares el límite es de 30 en interior y 75 en el exterior. La práctica de actividad física y deportiva no federada, al aire libre, puede realizarse de forma individual o colectiva, sin contacto y siempre que todas las personas del grupo sean convivientes, sin contar al monitor. Se pueden realizar actividades de tiempo libre destinadas a la población infantil y juvenil en el exterior sin superar el 50 %, del aforo ni el máximo de 50 participantes, incluidos monitores. En espacios cerrados, el límite es de 25 personas.

Silvia Pereiro, pizzeria cafetería Hilton: «Imos ter só servizo de comida a domicilio de xoves a domingo»

BASILIO BELLO

La mayoría de bares de Vimianzo están cerrados desde hoy temporalmente y muchos reorganizan su actividad para adaptarse a las nuevas restricciones. Es el caso de la pizzería y cafetería Hilton. «Imos ter só servizo de pedidos para levar de xoves a domingo en horarios de comida e ceas», dice Silvia Pereiro.

La hostelera añade que la imposibilidad de reunirse personas no convivientes se traduce de por sí en una bajada de clientes. «Non nos compensa abrir dentro coa metade de mesas porque só pode estar unha soa persoa dese xeito, ao non poder xuntarse xente que non viva xunta. Ademais, se ven alguén só a tomar algo e non a comer, teriámoslle que dicir que non pode».

Pablo Aller, de A Casa da Canle: «Non temos case reservas, porque non se pode entrar no Concello»

Ana Garcia

A pesar de que los restaurantes sí pueden trabajar en el interior, la mayoría no esperan clientes para los próximos días. «Non temos reservas, porque ao non poder entrar no Concello a xente de fóra, e só poder reunirse os conviventes, poucos comensais van vir», apunta Pablo Aller, de A Casa da Canle, situada en Braño.

El negocio solo trabaja bajo la fórmula de cita previa. «Nós vivimos aquí, entón se alguén nos chama para reservar abriremos, e senón, non», indica Aller, que entiende las medidas, pero se pregunta por qué son más duras en la hostelería que en otros sectores. «Se se pode ir facer deporte e ao ximnasio, e non se pode ir comer. Hai menos risco de contaxio aí? Non o sei», reflexiona.