En el Campo da Saleta se celebró ayer la Festa do Pan de Cea, una cita que se organiza desde 1992 dedicada a este producto que cuenta con Identificación Xeográfica Protexida. Los organizadores se vieron desbordados por la demanda y las 2.900 piezas cocidas para la fiesta se agotaron antes de las tres de la tarde. Las características particulares de la elaboración artesanal (el proceso dura 7 horas) impidió que se pudiese disponer de abastecimiento para dar respuesta a las personas que se quedaron sin poder comprar el pan.
Vimianzo culminó su regreso al medievo con el Asalto ao Castelo. Ni siquiera la lluvia fue capaz de apagar el fuego de la ira irmandiña. El fuerte aguacero a medianoche del sábado no fue impedimento para que una multitud siguiese las antorchas y los tambores para ayudar a Beltrán de Eáns a deshacerse del poder opresor de Beatriz de Moscoso. Samarúas, Susana Seivane, Mayayo Rif y los acordeonistas Kepa Junquera y Pazos de Merexo pusieron la música a la fiesta.