En el PSOE provincial insisten: la moción de censura en Ponteceso es inviable

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

PONTECESO

Cedida

Los socialistas creen que los promotores precisarían de una mayoría reforzada

06 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los seis ediles díscolos con la gestión del alcalde de Ponteceso, el socialista Xosé Lois García Carballido, le reclamaron el pasado fin de semana, y mediante un escrito (hubo otra petición anterior pero de forma oral), que renuncie al cargo para que las riendas del consistorio recaigan en otro compañero, previsiblemente del actual equipo de gobierno. Ese intento de forzar la salida de Carballido lo argumentan en que solo cuenta con un apoyo, el de la edila Noelia Varela, y claro, con solo 2 de los 13 concejales a favor se hace insostenible gobernar el Ayuntamiento cuando restan dos años y medio de mandato por delante.

Los díscolos piden por el bien «dos veciños e veciñas e dos autónomos» que dé un paso al lado. Pero, claro, Carballido se siente fuerte y plenamente respaldado por la dirección provincial socialista y por los propios vecinos, quienes en mayo del 2019 le otorgaron una amplia mayoría (8 de 13 actas), en lo que han sido los mejores resultados del PSOE en Ponteceso en décadas. Pero entre los díscolos nadie quiere dar el paso al frente de solicitar una moción de censura. ¿Por qué?

Mientras que en el PP y en APIN-SON consideran que se dan las circunstancias jurídicas y legales para promoverla, en el PSOE provincial volvieron a insistir: es prácticamente inviable. Y es que a pesar de que una sentencia del Tribunal Constitucional derogó parte de la conocida como ley antitransfuguismo, sigue en vigor el artículo que impone una mayoría reforzada en el caso de las mociones de censura apoyadas por concejales que hubiesen formado parte del grupo del alcalde. Es decir, por cada edil en esa situación debe haber un voto extra a favor. En el caso de Ponteceso son 13 ediles: 8 del PSOE, 3 del PP y 2 de APIN-SON. Seis del PSOE son los que desean bajarse del barco socialista. Según la ley antitransfuguismo, en caso de confirmarse la baja del partido de estos seis concejales los promotores debería lograr otros seis apoyos a mayores, pero claro, las matemáticas no cuadran, al tener la corporación 13 actas.

De no concretarse la medida o que los seis críticos regresen al redil, se puede dar la circunstancia de que García Carballido gobierne con el apoyo de su única edila leal (Noelia Varela) y trabajando a media jornada en el consistorio y golpe de real decreto hasta mayo del 2023.

En el PSOE ponen como ejemplo de Ponteceso lo que sucede en Ourense con el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, al que se le marcharon 12 de sus compañeros de Democracia Ourensana. En el PP intentan forzar su salida, pero el regidor, como García Carballido, se niega a dimitir.