La telefonía fija en el rural: tendidos viejos que solo dan problemas

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CARBALLO / LA VOZ

PONTECESO

Ana Garcia

El mal estado de postes y tendidos multiplica las averías en la zona, que llegan a durar semanas enteras

30 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Buena parte de las viviendas y negocios de Buño estaban ayer sin teléfono. Detectaron el fallo ya el martes y algunos afectados utilizaron las redes sociales para que sus clientes supieran del problema. Facilitaban un número de móvil para poder mantener los negocios en funcionamiento, algo que se pasó toda una semana sin poder hacer Manuel Varela, propietario del restaurante Mar de Ardora de Cabana, que ayer mismo recuperó el servicio después de que su caso saliera en La Voz de Galicia.

El hostelero no ha tenido que esperar tanto como los vecinos del entorno del cuartel de la Guardia Civil de Ponteceso que estuvieron 19 días por la caída de un poste. Uno de los afectados, Antonio Pacoré Balsa, señaló ayer que quedaron sin teléfono el 4 de noviembre. El 21 el caso se publicó en La Voz de Galicia y «o 22 chamaron e o 23 viñeron en tres coches dunha empresa que traballa para Movistar. Era sábado, pero a primeira hora xa estaban aquí. Querían empalmar a liña, como fixeran noutros lados, pero dixen que non, consultaron ao xefe, pero puxeron unha nova desde a primeira casa ata a miña», explicó ayer.

En Matío también denuncian que se quedaron sin servicio ya la semana pasada

Las denuncias en las redes sociales de los afectados por la falta de servicio telefónico ha desencadenado un reguero de solidaridad y la oportunidad de dar a conocer su situación. En Matío, en el municipio de Laxe, llevan desde la semana pasada también sin servicio. No se trata de todo el lugar, sino de unas cuantas viviendas.

Buño

Es lo mismo que ocurre desde el martes en Buño. Las casas que tocan a Leiloio no tienen problemas, pero las más centradas en el núcleo, sí. Ayer estaban sin servicio el estanco y la librería, además de varios negocios de olería como Alfarería Aparicio. Gonzalo Añón fue de los que colgaron un número de móvil en la red para que los clientes se dieran por enterados.

As Revoltas

Algunos de los afectados han expresado su intención de cambiar de compañía, pero el tendido, que es donde se produce la mayor parte de los fallos, es de Movistar. Manuel Varela, del restaurante Mar de Ardora, comentó los problemas que tuvo para tratar con R, su compañía, y con Movistar, la única que podía resolver el problema. Ayer mismo recibió una oferta de la compañía Orange para pasarse a un móvil que funciona como un fijo y que no depende de un tendido. Aseguró que iba a decantarse por el nuevo sistema.

Seiruga

Sin embargo, la persona que pasó más tiempo a la espera de una reparación probablemente haya sido Conchita del Río, una hostelera que vive en Seiruga, en el municipio de Malpica. A finales de agostó cayó el poste que había cerca de su casa y hasta hace unos 20 días estuvo esperando. El caso es prácticamente el mismo que el de Ponteceso, un tendido en muy malas condiciones que termina por romper. En Seiruga acudió un operario al cabo de una semana, pero coincidió con un día de viento y no pudo hacer su trabajo. Tardó semanas en regresar.

Para los particulares la falta de servicio supone una enorme incomodidad porque quedan también sin Internet, pero para los empresarios de la zona el teléfono es fundamental. En muchos casos, se pasan meses esperando a que les pongan una línea, como es el caso de Alfonso Vilar, que no ha podido trasladar su empresa inmobiliaria al centro de Baio por ese motivo.