Ponteceso despidió con luz y ritmo su Barquiña 2019

La Voz CARBALLO / LA VOZ

PONTECESO

¡INCLUYE ÁLBUM! Coches, bicicletas y motos clásicas, tirabalas, música... ¡de todo hubo estos días!

18 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Las Festas da Barquiña de Ponteceso han tocado a su fin. Lo hicieron con música ayer a mediodía, y con mucho ritmo al son del Combo, en la noche del lunes. La misma en la que, después de ocho años, el cielo se volvió a embellecer con fuegos artificiales lanzados desde un entorno único, el del puente frente a la casa de Pondal, también iluminado.

ANA GARCIA

Han sido muchos días de animación y toca hacer balance, como lo ha venido haciendo el Museo Etnolúdico de Galicia, el Melga, que junto a la Fundación Ricardo Pérez y Verdes y, en colaboración con Concello, Protección Civil y comisión, promovió diversas iniciativas. Una de ellas, el quinto campeonato de tirabalas, celebrado el sábado y por vez primera en la Praza do Recheo. Ocho tiradores adultos y otros tantos infantiles tomaron parte en la propuesta, resultando imposible batir al campeón hasta el momento, Carlos Andrade. De hecho, lo que hizo él fue batir su récord, con 37 de los 45 puntos, subiendo de los 34 de la pasada edición. Se llevó 150 euros, un jamón y una riestra de chorizos. Comenta Ricardo Pérez y Verdes, gerente del Melga, que tuvieron la compañía de la edila Raquel Fondo, y también que desean una mayor participación para el año.

ANA GARCIA

Donde sí hubo una masiva respuesta fue en la novena edición del Ponteclásico, una concentración de coches y motos clásicas organizada para el domingo por Eventos de Ponteceso y que reunió a casi 200 personas en el Melga, para una visita guiada. Hubo de ser bien rápida, para después dirigirse a la Praza do Recheo y a los jardines de la casa natal de Pondal, donde pudieron conocer la historia del bardo. Al Ponteclásico sumó el Museo Etnolúdico este año su sexta Ruta de Bicicletas Clásicas, que se vio afianzada con éxito. Treinta ciclistas ataviados de época tomaron parte en la propuesta: con su Orbea de varillas del 1936, Jorge Longarela batió el récord de antigüedad. Es también de reseñar la de Serafín Ures, de Pazos, de 1938. Desde Pontedeume, Laxe, Arteixo, A Coruña, Ferrol, Ponferrada o Vigo llegaron los participantes: la de Ponteceso es la ruta más numerosa que se celebró hasta el momento en Galicia, y aguardan llegar algún día al nivel de Esposende (Portugal), con 200 ciclistas. Por lo de pronto, tienen la fidelidad de clubes como la Peña Ciclista Leboreira, cuyo presidente, Daniel Cendán, recibió un detalle por su lustro de apoyo. Nadie, de todas formas, se fue de Ponteceso con las manos vacías.