El conselleiro clausuró las actividades tecnológicas de la Fundación Pondal
11 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.«Non hai ningún tipo de dúbida de que temos que seguir coas Aulas Científico Tecnolóxicas Isidro Parga Pondal», dijo ayer el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, en la clausura de curso en la Fundación Eduardo Pondal de Ponteceso. Estaban de testigos el alumnado, muchos padres y madres y también varios alcaldes y ediles de la comarca.
Algunas de las alumnas presentaron sus proyectos en el acto de clausura y el éxito que consiguieron en ferias de ciencias como las de Galiciencia (Ourense) y Exporecerca (Barcelona), donde obtuvieron reconocimientos, así como Bilbao, con premios como estancias en la Universidad de San Sebastián y futuros desplazamientos a otros lugares. Carmen Rama, madre de una de las alumnas, dijo estar encantadísima con la iniciativa promovida en O Couto: «Só teño palabras de agradecemento», por el aprendizaje y la motivación que encuentra su hija. «É un gusto escoitarvos», manifestó Conde. Es más, comentó que a «calquera que vos escoite non tería dúbida que tería que matricularse nunha aula tecnolóxica da Fundación». Una de las cuestiones planteadas en el acto fue la muralla de dificultades que es necesario superar en el rural para acceder a buena formación. No obstante, el conselleiro apuntó que «o que non ten límite é o coñecemento e o talento, a cuestión é que hai que desenvolvelo».
En el acto estuvieron presentes los alcaldes de Ponteceso y Laxe y ediles de Malpica y Cabana.
Un proyecto pionero en Galicia desarrollado con ilusión y que está dando sus frutos
«É unha experiencia moi enriquecedora», manifestó el conselleiro antes de abandonar la Fundación Pondal, donde se interesó por los diversos proyectos que desarrollan los niños: el Panik Pork, de Uxía López y Alba Agrelo; el Mathouse, con Natalia Fariña al frente; un trabajo lingüístico de otro equipo de niñas, que han elaborado una amplia encuesta sobre las diversidad del gallego en varias localidades de la comarca; el diseño de una mochila que reparta el peso sobre la espalda; una aplicación matemática para comprobar la exactitud de las operaciones o un juego de ordenador, entre otras propuestas de más de una veintena de escolares, que están dirigidos por David Ballesteros y Bea López. «Voume encantado, sobre todo, pola ilusión dos propios rapaces», manifestó Conde.
Las actividades formativas se desarrollan los sábados y las familias son las que se encargan de trasladar a los niños a las Aulas. Este esfuerzo fue destacado por el conselleiro, quien quedó admirado por la ilusión de la chavalada. «O traballo que está a desenvolver a fundación con estas aulas tecnolóxicas é unha forma de motivar o talento, o coñecemento, sobre todo de motivar aos máis novos», comentó. Cree, asimismo que, «paga a pena este tipo de iniciativas». En realidad, la que lleva a cabo la Fundación Pondal con la aportación de la Consellería de Economía es una iniciativa «pionera en Galicia», desarrollada a través de Galiciencia y el Parque Tecnolóxico de Ourense y que está dando frutos. Está seguro, por ello, de seguir colaborando para darle continuidad. También valora su dimensión comarcal. El sábado será el último día de clase para los alumnos de las Aulas Científico Tecnolóxicas. Hasta el próximo curso.