«O estado dos nosos caladoiros é moito mellor do que as veces din os científicos»

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CARBALLO / LA VOZ

PONTECESO

José Manuel Casal

Rosa Quintana visitó la reparación del dique de Corme, valorada en 365.000 euros

04 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La principal preocupación del sector pesquero de la Costa da Morte es la limitación de las capturas y sobre todo, que la bajura tenga que devolver las xardas muertas al mar mientras otros las siguen pescando, lo que lleva ocurriendo semanas. «Eu comparto con eles que o estado dos nosos caladoiros é moito mellor do que ás veces informan os científicos á Comisión Europea e nese sentido tentamos conseguir datos precisos para lograr maiores posibilidades de pesca», dijo Rosa Quintana.

La conselleira añadió que desde el 2013 se han incrementado las cuotas, pero reconoció el problema que se está dando con la caballa «Pouco a pouco temos que ir cambiando o modelo de xestión da pesca. Sigo pensando que non é necesario que parte da nosa flota se desplace cara ao norte no momento que están pescando os vascos e os cántabros e hai abundancia dese producto no mercado, polo que os prezos son regulares. Sería mellor poder esperar a que chegue a xarda ás nosas costas porque imos tirar das nosas posibilidades de pesca, non nolas van esgotar nin os vascos, nin os cántabros nin os asturianos. Eu creo que pouco a pouco o sector tense que dar conta de ir mellorando tamén o seu modelo de xestión», explicó Rosa Quintana.

La responsable de pesca estuvo ayer en el puerto de Corme, donde la consellería se ha terminado gastando 365.000 euros en la reparación del dique Los daños del temporal de febrero fueron finalmente mucho más graves de lo que se pensó en un primer momento.

La obra supone una nueva inversión en un puerto en el que cada día hay menos barcos, aunque Rosa Quintana considera que el sector del mar no está en recesión. Asegura que no solo aguantó bien durante la crisis, sino que, además, el año pasado, se incrementaron las ventas. «Un dato que é moi importante é que as nosas escolas incrementaron as matrículas en máis dun 46 %. Quere isto dicir que aínda hai apetencia da xuventude para seguir apostando por este sector e eu creo que é unha responsabilidade das Administracións manter as infraestruturas necesarias para que a actividade se poida seguir desenvolvendo», explicó la conselleira.

La nueva demanda de seguridad para buzos mantiene embarcaciones sin poder trabajar

Las nuevas demandas de seguridad para buceadores del longueirón está complicando la vida a los mariscadores de la zona. Algunos están parados por falta de personal, puesto que además de los dos submarinistas es necesaria una tercera persona que se quede en la embarcación, pero para este patrón la Xunta no prevé un tope, con lo que se tendrían que repartir los dos previstos.

Suso Lema, mariscador de Muxía, reconoció ayer en Radio Voz Bergantiños que tiene la embarcación en tierra porque le falta una persona. Además no comprende en qué puede ayudar que haya un patrón en la embarcación. «Se eu estou no fondo cunha parella é esa persoa a que me vai coller se me pasa algo. O que está arriba non se vai enterar de nada. En todo caso, cando se dea conta eu xa levo dous ou tres minutos abaixo sen poder subir», explicó el mariscador.

Otro de los problemas es que solo podrían coger dos topes, con los que tendrían que pagar al que queda en la lancha, lo que no resulta en absoluto rentable, sobre todo ahora que los precios son más reducidos.

Este mariscador, como muchos en la Costa da Morte, bucea en apnea, lo que limita mucho las posibilidades de extracción.

Otro problema es que tienen que ir a trabajar juntas al menos dos embarcaciones. Resulta difícil poner de acuerdo a varias tripulaciones. Considera Suso Lema, como otros compañeros, que la Administración está siendo más permisiva con los que utilizan compresor que con los que van en apnea. De hecho, con maquinaria solo es preciso que vayan dos lanchas juntas, cada una con un hombre. En su caso, la embarcación tiene tres topes, pero solo cuenta con otro submarinista y le resulta complicado encontrar a un tercero.