PP y PSOE votaron a favor, mientras que el resto de la corporación se abstuvo para salvar un POS que asciende a medio millón de euros
10 may 2021 . Actualizado a las 21:20 h.Un escueto pleno de cinco minutos sirvió para materializar el acuerdo alcanzado la pasada semana entre las diferentes fuerzas políticas de la corporación de Muxía y salvar así medio millón de euros del plan de obras provincial. El POS había sido aprobado en febrero, pero en el último pleno se sometieron a votación unos requisitos técnicos exigidos por la Diputación y la propuesta no salió adelante, cayéndose a consecuencia todo el plan.
La oposición pidió entonces «diálogo» al alcalde, Iago Toba, y este les culpó de la parálisis en la que estaba sumida el Concello y les acusó de deslealtad al no respetar algo tan «sagrado» como los fondos provinciales.
La Diputación concedió a la corporación muxiana unos días para que resolviesen sus diferencias y el pasado miércoles los portavoces se reunieron durante cerca de dos horas para tratar de llegar a un acuerdo. La oposición aceptó que ya sería tarde para hacer cambios en la convocatoria de este año, pero se alcanzó el compromiso de que de aquí a final de mandato se consensuarán entre todos los grupos las obras a acometer con los fondos del POS.
Así las cosas, en el pleno de este lunes el PP votó favorablemente junto al grupo de gobierno, y tanto el edil del BNG como los dos no adscritos que asistieron a la sesión se abstuvieron.
«Con isto demostramos que se se fala pódese chegar a acordos que serán bos para Muxía», dijo la portavoz popular, Sandra Vilela, que añadió: «O camiño é este, oxalá sigamos así». También instó a que se cumpla lo pactado y se les convoque pronto para negociar posibles aportaciones al POS Adicional. En líneas similares se expresó el nacionalista Carlos Fernández, que pidió al alcalde «lealdade» con la oposición y con las propuestas que estos puedan aportar de aquí en adelante.«Nunca é tarde cando as cousas se encauzan», expresó.
Mónica Vilela lamentó, en nombre de los no adscritos, que no se hubiese convocado antes la reunión de portavoces que permitió desbloquear el POS. «A nosa é unha abstención condicionada a que se dialogue con prazo suficiente para que se poidan facer os proxectos [correspondentes ás súas ideas]», apuntó. Toba, por su parte, intervino breve y filosóficamente para reiterar que si ha dado su brazo a torcer es por el bien de los muxiáns, no porque valide las actitudes del resto de grupos: «Hai unha frase que serve moi ben para esta situación: 'No siempre se calla para guardar silencio, sino para conservar la paz'. A veces estar en paz é mellor que ter razón», dijo el alcalde muxián.