El Bela Muxía, primer albergue de primera categoría de España que logra la Q de calidad
MUXÍA
El establecimiento ha recibido numerosos premios de diseño
25 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El Bela Muxía es el primer albergue de primera categoría de España en certificarse con la marca Q de Calidad Turística, que otorga el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE). La entrega de galardones siempre coincide con Fitur, la gran feria turística mundial que se celebra en Madrid y que debería haber terminado ayer, pero, por motivos evidentes, ha quedado aplazada hasta mayo (y ya se verá).
El Bela logra así un distintivo de máxima calidad que reciben los albergues que han superado con éxito una exhaustiva auditoría en sus instalaciones y servicios. En concreto, que ha llevado a cabo la empresa homologada SGS. El Bela implementó un nuevo sistema de gestión «orientado ao servizo ao cliente e é mellora continua», indican desde la empresa. Añade que este distintivo «asegura que a súa prestación de servizo é garantía de calidade, seguridade e profesionalidade, aspectos diferenciadores que nun futuro próximo, como é o Ano Santo, serán a chave ao éxito, todo isto para asegurar aos clientes a mellor experiencia turística posible».
El Bela Muxía, desde su arranque, va mucho más allá de la simple hospedería. Su musealización es una reivindicación del Camiño a Fisterra y Muxía, con documentación que prueba que la ruta no es un moda pasajera, sino el fruto de las huellas de caminantes durante siglos, como explica su responsable, Pepe Formoso.
El albergue no ha dejado de crecer en todos los sentidos. Por ejemplo, hacia arriba, un obra de los arquitectos Creus y Carrasco. Con ellos ha ido a la Bienal de Venecia de Arquitectura, y ha logrado trece premios de diseño, diez internacionales y tres nacionales. La Q es un paso (muy importante) más. También figura destacado en la red de albergues juveniles. Las áreas temáticas corrieron a cargo del profesor Antón Castro, y la funcionalidad fue obra de Antón Pombo, un gran experto en el Camino.
Los huéspedes tienen a su disposición instalaciones cómodas, independientes y que garantizan la privacidad, también en las duchas. El aislamiento está garantizado incluso en las literas, con mesas, enchufes o mesitas propias. El arte se cuela por todas partes, con salas dedicadas a Rosalía o Lorca, quien compuso un poema con la Virxe da Barca como protagonista. Hay lavandería, salón, paneles fotovoltaicos, suelo radiante, terrazas con vistas... Por sus estancias han pasado, para actuar, artistas como Amancio Prada (tiene un apartamento dedicado), Miko Weaver, María do Ceo, Óscar Ibáñez, Fernando Fraga, Kepa Junquera, Luar na Lubre... Los conciertos siguen, ahora en streaming. Ha habido recitales poéticos, exposiciones... Es un concepto de hostelería y acogida al peregrino (visitante en general) que va mucho más allá de la litera simple de otros tiempos.