Solo uno de cada tres concellos tiene aprobado el nuevo presupuesto

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

MUXÍA

JORGE PARRI

Muxía tiene las cuentas públicas prorrogadas desde el año 2017, pero el alcalde, Iago Toba, prevé tener listas y aprobadas las nuevas «no prazo dun mes»

23 feb 2020 . Actualizado a las 16:23 h.

El presupuesto es el documento económico, contable y financiero más importante de un concello. Refleja, en un principio, una estimación de ingresos y gastos a lo largo de un ejercicio y lo que destina un equipo de gobierno a inversiones en obras, al mantenimiento de infraestructuras y servicios y al pago de sueldos de los funcionarios y trabajadores municipales. Y también, sus principales fuentes de financiación. El presupuesto debe reflejar la realidad económica y social de un municipio, de ahí, la importancia de que se trabaje con un documento actualizado. Sin embargo, una cosa es la teoría y otra, bien diferente, la realidad. Y la realidad indica que solo 5 de los 16 concellos de la zona tienen actualizado el presupuesto para este año: Carballo, A Laracha, Cee, Ponteceso y Dumbría. Llama la atención el caso ceense, en el que el equipo de gobierno, presidido por la socialista Margarita Lamela, obtuvo el apoyo del PP para sacar adelante las cuentas públicas (5.741.376 euros).

Pero hay municipios, en algunos casos con gobiernos con mayoría absoluta, que no sacaron adelante sus respectivos presupuestos y trabajan con ellos prorrogados. Los motivos argumentados son muy variados. Sandra Insua, de Camariñas, apuntó que su idea era tener ya vigor las nuevas cuentas públicas municipales, pero al tener a la responsable del área de baja laboral por maternidad y enfermedad se ha visto obligada a esperar «ao verán». En Coristanco, Juan García Pose maneja las aprobadas en el 2018 por su predecesor, Abraham Gerpe: «Estamos cunha funcionaria en acumulación e esperamos que nos chegue pronto unha en comisión de servizo para presentar á corporación un borrador do novo orzamento», explicó.

Litigios

En Cerceda, donde el PSOE tiene mayoría absoluta, manejan el presupuesto del 2018. Los litigios judiciales, tener durante un tiempo dos regidores en funciones y el reciente cambio de alcalde imposibilitaron actualizar las cuentas. Pero Juan Manuel Rodríguez García ya dejó claro que a la mayor brevedad posible presentará un nuevo presupuesto para este año.

Muxía lleva con el suyo prorrogado desde el 2017. Es de la etapa de Félix Porto al frente de la alcaldía. Presenta una relación de ingresos-gastos de 5,2 millones de euros, merced «á licenza de obra do parador e aos ingresos dos eólicos», indicó Iago Toba. Sin embargo, esas cuentas distan bastante de la realidad económica y social de Muxía. «Naquel momento tiñan vixencia, pero agora, tal vez, non a teñan», explicó el mandatario. De hecho, avanzó que en el plazo «dun mes» podría llevar a pleno las nuevas cuentas públicas que, a su juicio, sufrirán un recorte con respecto a las prorrogadas: «Temos orzamentados uns 3,5 millóns de euros aos que habería que engadir outro medio millón de subvencións, transferencias e o Plan Único da Deputación».

En Laxe, José Luis Pérez (PP) prevé tener en breve listas las nuevas cuentas públicas, que deberán sustituir a las aprobadas en el 2019 por el PSOE y el BNG.

Ahora bien, ¿es bueno o malo trabajar con presupuestos prorrogados? Según el alcalde de Zas, Manuel Muíño Espasandín, incluso tiene sus ventajas: «O gasto corrente e de persoal apenas varía dun ano para outro e a partida de investimentos en obras, coas axudas da Deputación e o Plan Único, así como outras transferencias doutras Administracións, non interfiren no traballo diario. Pero se elaboras un novo orzamento corres o risco de que o Goberno central te impoña restricións ou recortes, mentres que se traballas co prorrogado esa circunstancia non se dá», esgrimió el regidor zasense.