La policía de Muxía intercepta a un coruñés por aparcar mal y ve que lo buscaban en un juzgado

La Voz CEE / LA VOZ

MUXÍA

XESÚS BÚA

El hombre detenido, de unos 50 años de edad, es vecino de A Coruña

14 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La Policía Local de Muxía detuvo este lunes por la tarde a un hombre de unos 50 años de edad, vecino de A Coruña y que responde a las iniciales Á. S. M., contra el que pesaba una orden de detención y personación dictada por un juzgado de la capital herculina. El implicado, que pasó la noche en los calabozos de la Guardia Civil de Carballo, fue puesto ayer mismo a disposición judicial en Corcubión.

El apresamiento fue casual, ya que, en principio, el agente actuante desconocía las circunstancias del sujeto. Sobre las 17.30 horas comprobó que había un vehículo, un Ford Fiesta, estacionado en un lugar de la calle de la Marina, en el que está prohibido aparcar, tal como muestra la señalización tanto horizontal como vertical.

El policía le pidió al posteriormente detenido, que se encontraba sentado en el asiento del conductor, que se identificase y que le entregase la documentación del vehículo. Después de mucho rebuscar por el coche, supuestamente para dar con los documentos reclamados, estos no aparecieron. Le facilitó al agente sus datos y ahí fue cuando, a través de los sistemas de información de los que disponen las fuerzas de seguridad, saltó la alerta de que estaba reclamado judicialmente.

Pese a que el supuesto conductor presentaba síntomas evidentes de estar bajo la influencia de bebidas alcohólicas y a que carece de permiso de conducir, no le pudieron ser imputados ninguno de estos presunto delitos o faltas administrativas, puesto el agente no lo vio conducir en ningún momento. Cuando llegó al punto el turismo ya estaba parado.

Después de sendas llamadas sin éxito a la Guardia Civil y la Policía Nacional, el funcionario municipal procedió a hacer efectiva la detención y fue la patrulla de guardia del instituto armado, que entró de turno a las 22.00 horas, la que efectuó el traslado al cuartel de Carballo, desde donde ayer fue llevado hasta Corcubión.