El lobo marino Luimux deja los gases y la UCI y recobra apetito

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado CEE / LA VOZ

MUXÍA

CEMMA

El animal generó gran expectación en Muxía cuando apareció en febrero y ahora deja Nigrán por A Illa

14 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Luimux ya come. El macho de lobo marino, Halichoerus grypus, de 110 centímetros de largo y 28 kilos de peso, que generó una gran expectación en el puerto de Muxía, cuando apareció por allí el pasado 17 de febrero, abandonó la unidad de cuidados intensivos de Nigrán el jueves de la semana pasada y ya se encuentra en las instalaciones del IGAFA en la Illa de Arousa. El objetivo es que siga avanzando en esta segunda fase de recuperación, que gane peso hasta llegar a los 30 kilos y que mantenga «exercicio e aclimatación á temperatura ambiente» para «garantir que leve a cabo as súas función normalizadas de procura de alimento», como explican los científicos de la Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños (Cemma), que lo recogieron el día de su hallazgo, gracias a la alerta de Protección Civil a la Rede de Varamentos, y que se ocupan de su cuidado. No le queda mucho porque «atópase en moi boa forma física e cun bo peso corporal». Lo que se lo impedía era «unha forte afección parasitaria con abundantes gases». De hecho, cuando lo encontraron estaba agotado con mucha tos y dolor abdominal. Incluso se mostraba irritable y agresivo. Se negó a comer durante tres días, pero el tratamiento de los veterinarios de la Rede de Varamentos dio resultado y cada vez está más cerca de volver a su medio natural. Eso sí, antes tiene que recuperarse del todo durante su estancia en A Illa.