El turismo rural muxián tira de potencial ornitológico

Patricia Blanco
patricia blanco CARBALLO / LA VOZ

MUXÍA

XESUS BUA

La asociación Muxía Turismo Rural presentó en Moraime un proyecto al respecto: las posibilidades del municipio en esta materia son muchas

27 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El monasterio de Moraime, en Muxía, acogió ayer la presentación del proyecto Muxía Rural, Turismo Ornitológico, una propuesta impulsada desde la Asociación Muxía Turismo Rural, representada por Jesús Trillo, y con la colaboración del Concello -acudió Félix Porto, alcalde- y de la Sociedad Española de Ornitología. En la presentación, además de Francisco Canabal, propietario del hostel Monasterio de Moraime, estuvo presente el ornitólogo Fernando Pereiras de la Cal, quien dejó patente, tal y como explicaba ayer después del acto, que el turismo ornitológico no solo es un potencial, sino «el mayor potencial». En él, toda la Costa da Morte tiene mucho que decir. No obstante, ciñéndose a Muxía, según explicó, son cuatro los puntos calientes para la observación: la playa de Nemiña y sus campos, con la ría de Lires; el cabo Touriñán y su entorno; el puerto de Muxía y, también, la bocana de la ría de Muxía-Camariñas.

En este sentido, destacó dos cuestiones. Por un lado, la intensidad, siendo el cabo Touriñán una especie de corredor de aves marinas que viajan de norte a sur: cientos de miles de ellas de septiembre a noviembre, en un flujo constante. Por otro, la posibilidad de ver especies que, en gran medida, únicamente se pueden avistar aquí: solo en la zona de Nemiña-ría de Lires han contabilizado hasta 18 tipos de gaviotas, nueve de ellas rarezas a nivel gallego e internacional que, por tanto, sirven de reclamo para los amantes de este mundo y de su fotografía. En Muxía es posible avistar entre 250 y 300 especies diferentes, «una barbaridad». De cara a favorecer el turismo ornitológico, Pereiras de la Cal incidió en la conveniencia de instalar un observatorio de aves en la ría de Lires y, también, lo deseable que sería disponer de un barco. Asegura que es la mayor demanda, para hacer salidas pelágicas y ver aves marinas: «Es el mayor potencial de la Costa da Morte. Sin embargo, aquí no hay barcos que se dediquen al turismo», indica el ornitólogo. Los visitantes llegan a veces desde muy lejos y han de pernoctar y comer en la zona, con lo que eso supone.

Por parte de la asociación Muxía Turismo Rural, Trillo explicó que el proyecto tiene dos partes. Por un lado, la opción de una escapada ornitológica a Muxía, con paquetes en los alojamientos asociados. Por otro, un concurso fotográfico en el que podrá participar cualquier persona, tome parte o no de esa experiencia en los alojamientos. El proyecto formará parte de una campaña Travel Enjoy Respect, por el Año Internacional del Turismo Sostenible, con lo que llegará a los cinco continentes.