La muerte de un joven siempre es difícil de digerir. Se produce un sinfín de interrogantes a los que nadie encuentra explicación. Sobre todo cuando se trata de una muerte tan trágica y tan inesperada como la de un joven deportista como era Abdoulaye Fall Seck. Pero su huella ha dejado un poso imborrable para los vecinos de Muxía. Dicen de él quienes le conocían que era un chaval muy educado, amable, atento, humilde, compañero de sus compañeros y siempre con una sonrisa en la boca. Todas esas cualidades humanas no han paso desapercibidas para todos aquellos que han convivido con él. Tampoco en el mundo del fútbol de la Costa da Morte. Si algo tiene el deporte rey es esa extraña capacidad de remover conciencias, de hacer accesibles montañas que parecen inexpugnables. Por encima de colores y rivalidades bien entendidas mueve ese corazoncito que todos llevamos dentro y hace que todo el mundo se vuelque con un chaval, de apenas 15 años, que su mayor ilusión era pegar patadas a un balón en un campo de fútbol.
Nadie podrá devolver ya a Abdoulaye, que descansará para siempre en Dakar, de donde es originaria su familia y de donde marchó con su madre y sus otros tres hermanos hace ahora cinco años para Muxía en busca de un mejor futuro. Su padre ya llevaba cinco años en la Costa da Morte, enrolado en un palangrero con base en Camariñas.
El destino ha sido cruel con esta familia. Demasiado cruel. Pero si algo han demostrado siempre estas gentes de la Costa da Morte es su gran capacidad solidaria. Es una manera de decirle a la familia del joven fallecido que no está sola en este duro trance. La cuenta abierta en favor de los progenitores y hermanos de Abdoulaye es un pequeño ejemplo de esta ola solidaria. Hasta la jornada de ayer ya se habían ingresado más de 14.000 euros. Solo en las primeras 24 horas después de abrir esta cuenta corriente se llevaban recaudados más de 8.000 euros, dinero suficiente, según apuntaron desde el Muxía, para sufragar los gastos del traslado del féretro a Senegal. El resto del dinero irá destinado a la familia. «Todo o que sexa axudalos será pouco. Son xente humilde, traballadora que o están a pasar moi mal por esta traxedia», señalaron ayer desde la entidad. Y añadieron que esta cuenta solidaria se cerrará el próximo día 6 de mayo a primera hora de la mañana: «Esta fin de semana haberá encontros de fútbol e temos moitos petos repartidos». Desde el club han agradecido a todos los vecinos, entidades deportivas, sociales, instituciones y Administraciones todas las muestras de cariño recibidas en los últimos días. Abdoulaye bien se merece un reconocimiento póstumo como este.