La lucense que a los 48 años lo dejó todo para hacer su sueño realidad desde Malpica
MALPICA DE BERGANTIÑOS
Elisa de Soto es licenciada en Derecho, trabajó en Madrid, el surf la sedujo, emprende con un proyecto de «coaching» y no descarta estudiar psicología a los 50
18 dic 2023 . Actualizado a las 22:36 h.Nunca es tarde si la dicha es buena, dice el refrán. Elisa de Soto García, de Chantada, lo ha tomado al pie de la letra. Tiene 50 años y hace dos decidió dar un giro radical a su vida. Dejó un trabajo estable y media vida en Madrid para venirse a la Costa da Morte a «intentar cumplir un sueño», dice ahora, «encantada» desde Malpica, su nuevo hogar, desde el que emprende con un nuevo proyecto que resulta llamativo en la zona.
Siempre le gustó la psicología, pero estudió Derecho al dejarse llevar «por las imposiciones sociales», cuenta. Después hizo un máster de gestión en actividades culturales y acabó trabajando en un banco de la capital española en el departamento de patrimonio artístico. Cosas de la vida, más tarde pasó a gestionar en esa misma empresa «el talento, las personas». Pero después de diecisiete años de contrato, según traslada, la compañía llevó a cabo un expediente de regulación de empleo y ella aprovechó para cambiar de rumbo: «Decidí arriesgar. Dije: ‘Este es el momento'».
Desde siempre veraneó en San Vicente do Mar (O Grove). Sus padres viven en A Coruña, a los que solía visitar con frecuencia. Fue así como le surgió la curiosidad por hacer un deporte acuático. Practicaba capoeira en la comunidad madrileña. Un día, sus compañeros se vinieron a Razo a dar unas clases y ella también se desplazó. Allí conoció a un monitor de surf y a su escuela en Malpica. Fue así cómo se prendió de esta actividad y de la localidad, a la que se mudó con sus dos perros.
Especializada en estrés laboral
Más recientemente, desde hace un año, empezó a dar forma a su nuevo trabajo, para el que se formó en la Escuela Europea de Coaching, según apunta. Es coach profesional, especializada en estrés laboral. Así, ayuda a «gestionar el estrés, la resiliencia y la creatividad», señala. Es autónoma y se da a conocer bajo el nombre de Ama tu trabajo. Ya impartió talleres en A Coruña, Carballo y Malpica. Otros están por llegar, por ejemplo, en la escuela de negocios de Oleiros. «Tengo amor y vocación por esto. Quiero animar a otras personas desde mi experiencia y el coaching. Ahora me estoy acostumbrando a pasar de la ciudad al mar y a trabajar por cuenta ajena y a ser mi propia jefa», expresa.
A su vez, para su proyecto, está recibiendo asesoramiento desde el polo de emprendimiento de la Xunta en Coristanco. «Mi objetivo a largo plazo es trabajar para empresas en la gestión de recursos humanos», indica. Por el momento, ya estableció lazos con una asociación local.
En Malpica, no acaba de encontrar su nicho de mercado. Sin embargo, ella no cambia este pueblo por nada. Al menos por el momento. A las dificultades, les encuentra soluciones. Así, puede atender a los clientes vía telemática o mismo en la naturaleza.
De todos modos, en las experiencias que ha tenido mismo en el municipio malpicán dice haberse encontrado con gente «con muchas ganas de expresar las cosas que nos guardamos para dentro en un ambiente seguro y de confianza».
Lo cierto es que ahora, con 50 años, hasta se plantea saldar la deuda que tiene consigo misma y estudiar de una vez por todas psicología: «Más vale tarde que nunca», cerciora ella misma.
Sus sesiones pasan por diseñar un futuro «ideal» a través de un «circuito» con cuatro partes, que son las siguientes: «Marcarte un objetivo, analizar lo que necesitas aprender para conseguirlo, mirar qué lastres debes soltar para ello y fijarte también en qué te da energía», enumera. «El estrés puede venir por muchas cosas: por la gestión del trabajo, porque no estás a gusto probablemente con tu jefe... Tenemos muchos prejuicios», asegura.